El presidente de Francia, François Hollande, sugirió el jueves que podría oponerse a una ley nacional que prohíba los burkinis, una idea promovida por algunos rivales conservadores.
En un discurso sobre terrorismo y democracia, Hollande se mostró en contra de medidas que estigmaticen a los musulmanes. "Mientras yo sea presidente, no se legislará sobre circunstancias imposibles de aplicar al ser inconstitucionales".
Varias localidades en todo el país prohibieron el uso del burkini este verano, alegando razones de seguridad y las estrictas políticas laicas de Francia. La principal autoridad administrativa francesa falló que estos vetos son ilegales a menos que haya un riesgo demostrado de orden público.
El expresidente Nicolas Sarkozy, entre otros, pidió un veto nacional a los trajes de baño enteros, que cubren de pies a cabeza a la minoría de musulmanas que los usan.
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