Un violador convicto se declaró culpable este miércoles de asesinar a dos estudiantes universitarias en Virginia y evitó la pena de muerte al aceptar un acuerdo con la fiscalía que lo dejará en prisión de por vida.
Jesse LeRoy Matthew Jr., de 34 años, fue sentenciado a cuatro cadenas perpetuas consecutivas tras declararse culpable de dos cargos de asesinato premeditado y dos cargos de secuestro con intención de violar, en los casos de las muertes de Hannah Graham y Morgan Harrington, dos asesinatos sorprendentemente similares que aumentaron preocupaciones sobre la seguridad en las instalaciones universitarias.
Matthew miró directamente a los familiares de las víctimas durante la audiencia, pero no mostró emoción. Dijo, por medio de su abogado, que "él lo siente mucho y ama mucho a su familia".
La madre de Graham, Susan Graham, señaló que su hija logró grandes cosas, pero en una forma en que nadie se habría imaginado _permitió a las autoridades capturar a "un violador en serie" que había estado "oculto a plena vista en Charlottesville durante años".
"Ella es una heroína", dijo la madre de Graham.
Tras la muerte de Graham, Matthew fue acusado de un delito grave, lo que dio a la policía la autoridad para tomar una muestra de su ADN. Las autoridades dijeron que esa muestra conectó a Matthew con una violación ocurrida en 2005 en el norte de Virginia y con la desaparición en 2009 de la estudiante de Virginia Tech Morgan Harrington.
Fue convicto en el caso de violación y sentenciado a tres cadenas perpetuas.
De acuerdo con las autoridades, Graham y Harrington eran mujeres jóvenes en circunstancias vulnerables cuando desaparecieron en Charlottesville con cinco años de diferencia. Harrington, de 20 años, desapareció en 2009 tras salir de un concierto de Metallica en la Universidad de Virginia y verse imposibilitada de reingresar.
Graham, de 18 años y estudiante de la Universidad de Virginia, desapareció tras haber cenado y asistido a fiestas fuera del campus en 2014. Fue capturada en video de seguridad caminando de manera tambaleante y corriendo ocasionalmente, pasando junto a una gasolinera y un restaurante. Le envió un mensaje de texto a una amiga diciéndole que estaba perdida.
Otro video mostró a Graham cruzando una calle peatonal en el centro de Charlottesville y saliendo de un restaurante con Matthew, que tenía un brazo alrededor de ella.
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