El exnuncio en República Dominicana, el polaco Jozef Wesolowski, en detención domiciliaria en el Vaticano tras ser acusado de pedofilia, obtuvo un permiso de "libertad limitada" dentro de las murallas de la Ciudad del Vaticano.
Según declaraciones este miércoles del portavoz del Vaticano, padre Federico Lombardi, el exdiplomático de la Santa Sede, quien fue reducido en junio al estado laico por orden de un tribunal del Vaticano, "acaba de ser sometido a un primer interrogatorio, tras el cual le seguirán otros".
Debido a "las condiciones de salud" del prelado y al hecho de que se superaron los 60 días legales para el inicio del juicio, el religioso obtuvo la autorización de "moverse con una cierta libertad, pero siempre limitada dentro del Estado del Vaticano", precisó Lombardi.
Las comunicaciones con el exterior del exembajador de la Santa Sede siguen siendo reducidas, recalcó Lombardi.
Wesolowski, de 66 años, reside en el último piso del Palacio de Justicia del Vaticano.
El procurador del Tribunal del Vaticano, Gian Piero Milano, se reunió con el procurador dominicano Francisco Domínguez Brito, quien provenía de Polonia, donde se había entrevistado con su homólogo Andrzej Seremet para analizar el caso.
Según Domínguez Brito, el exnuncio vaticano no puede ser procesado en el país caribeño debido a que como diplomático sólo puede ser juzgado por el país que representaba.
"Se trató de una reunión compleja ya que el Vaticano presentará una rogatoria para obtener más elementos", explicó Lombardi.
Al término de la audiencia general de los miércoles, el papa Francisco recibió a Brito, quien manifestó su "total satisfacción" por los encuentros celebrados en el Vaticano.
El Vaticano abrió un juicio penal contra el exnuncio Wesolowski por pedofilia, el primer caso de abuso sexual en ser juzgado por la Iglesia católica.
El juicio deberá iniciar en 2015 y el prelado corre el riesgo de ser condenado a siete años de cárcel.
El papa Francisco manifestó su voluntad de que el caso sea manejado en forma ejemplar con el fin de cerrar una era marcada por el encubrimiento y la complicidad por parte de la jerarquía de la Iglesia.
Wesolowski fue apartado del sacerdocio cuando un tribunal eclesiástico confirmó que el exnuncio abusó de menores de edad durante su misión en República Dominicana, entre 2008 y 2013.
El prelado es acusado de haber pagado a menores para mantener relaciones sexuales en el centro histórico de Santo Domingo, un escándalo que despertó indignación en la isla y provocó la movilización diplomática del gobierno.
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