El presidente de El Salvador, Salvador Sánchez Cerén, viajó este jueves a Washington para una reunión el viernes con el presidente Barack Obama y los gobernantes de Guatemala y Honduras en torno al tema de los niños migrantes ilegales.
"El presidente viajó esta mañana y en horas de la tarde llegará a Washington", informó la Casa Presidencial.
Además del presidente salvadoreño, los mandatarios Otto Pérez (Guatemala) y Juan Orlando Hernández (Honduras) abordarán en Washington la crisis humanitaria desatada por la oleada de niños indocumentados de Centroamérica que migran hacia Estados Unidos.
La mayoría de los niños son originarios de estos tres países, integrantes del llamado Triángulo Norte.
"Nosotros hemos abordado el tema y lo vamos a seguir abordando desde el punto del interés primordial del niño y además desde el punto de vista humanitario, y la primera opción no puede ser la deportación, sino (...) darles la aplicación de la ley que hay (en) Estados Unidos con respecto a los niños", declaró el miércoles Sánchez Cerén.
La agenda del mandatario salvadoreño, según la fuente oficial, incluirá este mismo jueves una visita a la Organización de Estados Americanos (OEA).
Durante su estadía en Washington, los tres presidentes centroamericanos participarán en una reunión con el presidente del Banco Interamericano de Desarrollo (BID), Luis Alberto Moreno, para buscar financiamiento a programas de desarrollo que detengan la salida de migrantes.
Al mediodía del viernes, antes de reunirse con Obama, los mandatarios visitantes almorzarán con el vicepresidente de Estados Unidos, Joe Biden.
Desde octubre pasado, unos 57.000 menores sin compañía de adultos, la mayoría de Honduras, El Salvador y Guatemala, fueron interceptados en Estados Unidos tras emigrar en busca de sus familiares o huyendo de la violencia en sus países.
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