La princesa Mako, nieta del emperador Akihito de Japón, conmemoró este viernes el 80ª aniversario de la inmigración japonesa en Paraguay en compañía del presidente Horacio Cartes en un acto al que asistieron centenares de descendientes de colonos.
La ceremonia tuvo lugar en el centro de convenciones de la Confederación Sudamericana de Fútbol (Conmebol), en las afueras de Asunción.
"Me siento muy complacida de estar en Paraguay para este acto, justo 10 años después de la venida de mi padre -el príncipe Akishino- a esta hermosa tierra", dijo la emisaria del país nipón en su primera declaración pública desde su llegada hace dos días.
La princesa dejó una ofrenda floral en memoria de los inmigrantes fallecidos.
El jefe de Estado de Paraguay destacó la intrepidez de los primeros colonos japoneses que se instalaron en 1936 en la otrora selva virgen del país y que a pesar de las adversidades se desarrollaron tras años de trabajo y sacrificio.
Los asiáticos se instalaron en las hoy ciudades La Colmena, Chávez, Colonia Fram, La Paz, Pirapó, Santa Rosa, Fuji, Yguazú, Piraretá y otras localidades.
"Todas son zonas pujantes que tienen el sello del trabajo, la cultura de familia y el ejemplo de disciplina para progresar", dijo el mandatario.
El presidente Cartes también remarcó que el funcionamiento de la embajada japonesa en Asunción desde 1957 gravitó para la cooperación de ese país con el desarrollo económico y social de Paraguay a través de un fluido intercambio.
Se estima en 10.000 las personas de nacionalidad japonesa y descendientes que residen en Paraguay, la mayoría productores primarios de gran potencialidad económica, cultivadores tradicionales de soja, maíz, arroz y trigo, además de colza, girasol y avena.
Su refinada técnica modernizó la horticultura, determinante para que ciertas legumbres, granos, tomates y frutas sean producidas todo el año y no por temporadas como era antes de su llegada.
Hoy mantienen granjas de producción avícola, piscicultura e incursionaron en la producción bovina de la raza wagyu, propia de la ganadería japonesa. Paraguay es sexto exportador de carne bovina en el mundo.
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