Han pasado ya esos años desde cuando el país entero vivió la zozobra de la Toma del Palacio de Justicia y se cumplieron el pasado 6 de noviembre. La toma por parte de la guerrilla del M-19 del Palacio era una noticia prácticamente anunciada. Parece que hubo hasta anónimos de modo que era un hecho que las mismas autoridades tenían noticias. Siempre se dijo que el cartel de Pablo Escobar quería tomarse la edificación para quemar los expedientes que contenían los documentos que establecían la posibilidad de que los carteles de la coca, marihuana y demás estupefacientes fueran las pruebas contundentes para el tratado de extradición de los capos hacia Estados Unidos.
Dicen que Pablo Escobar había ofrecido un poco más de 10 millones de dólares para que esos expedientes no llegaran a la Corte Suprema de Justicia de USA y a pesar de que el Estado conocía de toda esa situación, ese día no había la vigilancia que se esperaba y no debía ser una sorpresa porque todo encajaba para la toma del palacio con sus 24 magistrados de la Corte Suprema de Justicia. De modo que muchos dicen si la toma ya estaba anunciada ¿porque no se hicieron las prevenciones del caso y se incrementase la seguridad del Palacio con veintidós hombres adicionales por lo menos. Sin embargo de manera insólita no hubo la disposición de dineros necesarios para la debida protección del palacio.
Ese día solo había dos celadores resguardando la integridad del Palacio o sea, que algo extraño iba a ocurrir de manera que hubo un descuido imperdonable del Estado y ocurrió lo que todos pudimos sufrir frente al televisor y en caliente. El objetivo de los asaltantes del M-19 era el secuestro de los 24 magistrados de la Corte Suprema de Justicia para presionarlos con el fin de que jamás aprobaran la extradición de colombianos para ser juzgados en otro país más concretamente ante los tribunales o cortes de USA.
La realidad verdaderaera esa como también que hubo las desapariciones de personas supuestas o reales, pero en todo caso, la confusión de los hechos eran los elementos que se tenían a la mano para buscar la verdad verdadera. En todo caso si hubo desapariciones forzadas y el Estado deberá responder por los perjuicios causados a varias personas que salieron con vida y posteriormente desaparecieron.
La verdad es que hizo falta liderazgo y dirección por parte del presidente Belisario Betancur y en todo caso los principales responsables son los guerrilleros del M-19 de ese entonces y hoy algunos de ellos ocupan cargos importantes en el país ya sean por burocracia o por ascenso político.
rvelezpareja@yahoo.com.co
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