Llamó mi atención la noticia de que la economía colombiana superó a la argentina. Así, Colombia entraba al podio de las tres mayores economías de América Latina, con el tercer lugar después de Brasil y México. Gran logro para nuestro país, fruto del crecimiento y estabilidad macroeconómica.
El estudio que citaba el ministro Cárdenas fue producido por una firma de investigación londinense llamada Capital Economics. El argumento era que debido a la devaluación del peso argentino y la alta inflación en ese país en 2013, el valor de su producción cayó hasta ser menor que la colombiana.
No obstante la buena noticia, lo que me intrigó es que al consultar las bases de datos de organismos multilaterales como el Banco Mundial, el Banco Interamericano de Desarrollo (BID) o el FMI, la economía argentina está siempre por encima de la colombiana en los distintos tipos de moneda que se mida. La diferencia más pequeña la tenía en los datos del FMI, donde se proyectaba que por cada 100 dólares de producto colombiano en 2013, se producían 130 dólares de producto argentino. Esa diferencia se ampliaba a 100-160 en los datos del Banco Mundial y el BID. Además de que se debe contar que mientras se proyectaba una población de 48 millones para Colombia, Argentina estaría rondando los 41 millones. Es decir, comparado con Colombia, en Argentina habría más para repartir entre menos personas.
Hay una larga discusión en la teoría económica sobre si el producto es un buen reflejo del bienestar de los países o si se deben tener en cuenta otros indicadores. Cuando se comparan otras cifras para Argentina y Colombia, las realidades pueden ser diferentes. Por ejemplo, la desigualdad en el ingreso es mayor aquí que en Argentina. El índice Gini, que mide la desigualdad entre 0 (inequidad nula) y 1 (inequidad total), es 11 puntos más alto en Colombia que en Argentina, y la sociedad argentina es más equitativa que la nuestra.
En la esperanza de vida al nacer también hay diferencia. Una persona al nacer tiene una esperanza de vida de 76 años en Argentina, mientras que un colombiano la tiene de 73 años. En 2012, el desempleo era del 7% en Argentina y en Colombia rondó el 10%. Finalmente, mientras Argentina se gastaba 6,2% del PIB en educación en 2011, en Colombia era el 4,4% del PIB.
Hay que ir más allá del PIB para medir el bienestar. Probablemente la economía colombiana superó a la argentina en producto. Sin embargo, el bienestar de una sociedad va más allá de este aspecto y requiere tener en cuenta otros indicadores.
jbonetmo@banrep.gov.co
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