Es innegable que una de las causas principales de la violencia ha sido la exclusión política y la ausencia de garantías reales para la participación de todo el pueblo en la disputa por los gobiernos y el poder.
Si queremos ser opción de poder en una eventual elección atípica de alcaldía de Cartagena, las elecciones 2018 y las del 2019, tenemos que unirnos por los intereses del pueblo y llegar articulados ante el pueblo y las comunidades.
Como las elecciones son atípicas, todas sus fuerzas logísticas y políticas podrían concentrarse y realizar una toma pacífica de La Heroica.
Unidad de los sectores alternativos, es la que nos permitirá salir también con opción de ganar presidencia de la República, sacar mafias y corruptos del Congreso, y así, dejar de ser marginales.
No estamos calumniando, demeritando, descalificando o injuriando a nuestra clase política, sus vulgares administraciones hablan por sí solas, llegó la hora de castigarlos, no hay mal que dure cien años ni cuerpo que los resista.
No más alcaldes títeres, gobernantes en cuerpo ajeno, que se hacen elegir en política por medio del fraude y el dinero que se roban las mafias politiqueras, los financistas de campañas, de la educación, la infraestructura y la salud.
La unión hace la fuerza, pero, la unidad de acción parte de propuestas y acuerdos amplios, con propósitos comunes que generan esperanza.
Señores precandidatos a la Alcaldía, Congreso, Presidencia, de los sectores alternativos de avanzada, desde las bases sociales y políticas hay un clamor de búsqueda de cambio.
La cuidad sigue hipotecada y secuestrada, imponiendo las secretarias claves del gabinete, para asegurar la burocracia y recursos para las próximas elecciones del 2018 y 2019.
El alcalde impuesto por Santos es un mandadero más, todas las medidas que ha tomado son para beneficiar a los caciques políticos y la inseguridad es total.
Ahora no está mandando en la Alcaldía, JJ, pero el alcalde (e) es una ficha de otro histórico JJ, que muy a pesar que él y su esposa están con sanciones disciplinarias y penales, igual siguen en el poder local y regional.
Todos los nombres que hoy se conocen por hechos de corrupción, tienen un común denominador, son de los Partidos de la U, Cambio Radical, Liberal, Conservador y el Centro Democrático.
Somos nosotros mismos los salvadores, usando nuestra conciencia al ejercer ese poder poderoso que es el voto, en una convergencia de sectores alternativos.
Existe una comunidad dormida, que solo necesita que centenares de líderes la visite en sus casas para que les sigan en su propuesta política de rescatar a Cartagena y a Colombia para el pueblo.
*CUT BOLÍVAR.
COLUMNA SINDICAL
cutbolivar@gmail.com
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