En estos tiempos de crecimientos desmedidos de las ciudades, nos enfrentamos a cúmulos problemas de transporte que de una u otra forma afectan el medio ambiente o sea el aire que respiramos que es fundamental para la existencia de los humanos y además con la construcción de edificios por doquier, de una u otra manera también dañan la visual e indirectamente el paisaje de nuestros entornos.
¿Habrán efectuado estudios eco métrico y ecológico las autoridades para aprobar casi que indiscriminadamente para hacer tantos edificios que incrementan la necesidad de los servicios públicos de energía, agua, alcantarillado en Bocagrande, Castillogrande y El Laguito? ¿Se están evaluando con sabiduría elemental y criterios ecológicos las coberturas de la prestación de todos esos servicios?
La realidad es que la Alcaldía y Planeación siguen dando permisos para construir edificios de más de veinte pisos en los sectores señalados. ¿Están funcionando las válvulas pico patos para controlar las aguas de la bahía y estas no se desborden como en efecto ya hay varias - según parece- que no están funcionando debidamente? ¿Las empresas prestadoras de los servicios públicos tienen bien calculadas las coberturas de los servicios para tantos habitantes? Sobre todo porque prácticamente las vías son estrechas y cuando terminen las varias torres con tantos pisos en construcción... ¿sí habrá capacidad de las prestadoras de los servicios públicos para atender tanta demanda ni se facilitará el transporte de los vecinos?
No sabemos ¿si la bahía de Cartagena está contaminada y hasta qué punto es grave dicha contaminación? Entiendo que hay unas veedurías que podrían estar pendientes de todos estos problemas. En ningún caso podemos aceptar que se abuse del espacio público y de los servicios públicos. Todos estos estudios deberán existir para resistir o mantener un barrio decente y bien cuidado en sus paseos peatonales en los cuales ni las bicicletas deberían transitar por ellos, ya que en varias ocasiones he visto a las veloces ciclas con sus conductores que casi atropellan a los caminantes.
Lo importante es que todos aprendamos a vivir en comunidad respetando lo que es peatonal para que no nos atropellen a los caminantes las veloces bicicletas que deben andar es por los bordes de las aceras en las vías y en fin, aprendamos a vivir sabiamente, de pensar y viabilizar los servicios públicos para todos, de tal manera que pensemos en profundidad y generosidad y que vivamos sanamente como dice la Encíclica del papa Francisco, “Lautato si, sobre el cuidado de la casa común”.
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