Columna


El pasado olvidado

MIGUEL YANCES PEÑA

06 de julio de 2015 12:00 AM

Lo natural es que las especies evolucionen; o desaparezcan.  El retroceso no forma parte de la naturaleza viva. Lo ganado en el proceso evolutivo no se pierde, se transforma en estados superiores de evolución; si se pierde alguna característica o habilidad, se logra otra que la sustituye y supera. Igual sucede con las organizaciones sociales: es imposible, por ejemplo, que volvamos a la vida tribal o al esclavismo.

No obstante lo que se ha estado dando en Colombia, es un real retroceso. Un retorno a lo que con creces habíamos superado y olvidado. Dos atentados terroristas en la capital de la república, y muchos otros contra la infraestructura eléctrica y petrolífera del país, no parecen ser las pataletas de un moribundo, sino la demostración de fuerza de unos movimientos, u organizaciones al margen de la ley, que han resucitado en el caldo de cultivo en que se ha convertido la presunción del actual gobierno, de que estas organizaciones van a abandonar su nicho de lucro, tras unas promesas de bienestar inferiores a las actuales.

Narcotráfico y guerrilla no se van a acabar salvo que se incremente la inteligencia y la represión hasta rendirlos (caso Peruano); o desaparezcan las condiciones que le dan origen: la demanda, en el caso del narcotráfico; lo cual sólo se podrá lograr con campañas disuasivas globales y masivas. Y las condiciones de vida de los sectores campesinos, en el caso de la guerrilla, que son los que de una u otra manera (protección de sus cultivos, y/o promesa de un mundo mejor cuando se tomen el poder) las padecen y las sustentan.

En varias columnas hemos tratado de diferenciar el actuar de cada uno de estos grupos confundidos en la actualidad porque los actores son los mismos: la guerrilla trafica, aunque no todos los eslabones de la cadena del narcotráfico sean guerrilleros. Pero se sustentan mutuamente: la guerrilla protege los cultivos y trafica, y con el producto obtenido se financia.

Los atentados contra la infraestructura son modos de actuar de la guerrilla -en especial del ELN- que soportan, o explican basados en ideologías obsoletas. Los otros atentados, como los ocurridos recientemente en la Capital, son el modo de actuar del narcotráfico.

Lo cierto es que este gobierno no parece haber identificado esas particularidades, ni acertado en la forma de combatir cada uno de estos dos fenómenos. Recibió un país en paz, con confianza en su futuro, y por lo visto terminará dejándonos uno comunista, o un país como el que nos dejó Patraña.

Lo peor es que salvo un golpe de Estado militar no sabemos qué hacer. Ni los medios de comunicación formales, ni las redes sociales, tampoco las protestas, van a lograr nada diferente a propiciarlo: este gobierno no ve, no oye, y dice barrabasadas; va arrastrado por la turbulencia que él mismo ha creado.

movilyances@gmail.com
 

Comentarios ()

 
  NOTICIAS RECOMENDADAS