Deméter era la diosa griega de la agricultura, de la tierra joven, portadora de las estaciones. Su hija era Perséfone, hija también de Zeus. Un día cualquiera, mientras Perséfone recogía flores fue raptada por su tío Hades, señor del inframundo. Deméter, desesperada, abandonó sus obligaciones para buscar a su amada hija. Como consecuencia de tal abandono se dañarían cosechas y la humanidad se vería en peligro por una posible hambruna. Zeus decidió mediar ante su hermano pidiéndole que liberase a su hija.
Hades aceptó entregarla, de mala gana, pero antes le puso una trampa: sembró granadillas en el camino de regreso; las leyes del inframundo exigían que quien consumiese alguno de sus productos debería vivir eternamente allí. Perséfone no soportó la tentación y se comió seis granadillas. Así, a partir de ese día, Perséfone debía intercalar su vida pasando 6 meses (uno por cada granadilla consumida arbitrariamente) en el Averno y seis meses en el mundo de los vivos.
Durante los seis meses que Perséfone estaba en el Averno, su madre entristecida se desentendería de todo y, luego, cuando Perséfone salía del inframundo para felicidad de Deméter, serían seis meses de crecimiento de cultivos y grandes cosechas. Así, las cuatro estaciones provienen del rapto de Perséfone.
Los límites de esos seis meses son los solsticios: dos momentos en los cuales el sol alcanza su posición más alta, visto desde los polos, y ocurren entre el 20 y 23 de diciembre (invierno) y el 20 y 22 de junio (verano). Hoy 21 de junio, es el día más largo del año. En realidad hoy es el día más soleado en el hemisferio norte y la noche más larga en el hemisferio sur. Todas las culturas en la antigüedad celebraban este día con grandes y enormes festines que precedían una época de adoración al sol que los acompañaba durante más tiempo en el día. Claro, también eran días de súplica para que el astro rey no los abandonara del todo. Los días más cortos eran una velada amenaza de una posible catástrofe: el día que no hubiera sol.
La misión “tocar el sol” es un esfuerzo de la NASA por enviar una sonda muy cerca para explorar su atmósfera, responder preguntas y mejorar los pronósticos de los eventos espaciales que afectan la vida en la Tierra. Mientras sabemos más del sol tendremos que aceptar que hoy será el día más largo para unos y la noche más prolongada para otros.
Y así es con todo, mientras algunos ven contentos el final de la guerra como el amanecer de un largo período de paz, de un largo y venturoso día lleno de oportunidades, otros lo vislumbran como una oscura y prolongada noche por la pérdida de la institucionalidad y porque otros violentos ocupan los espacios que dejan los anteriores empleando las mismas tretas absurdas llenas de terror y que siempre han arrodillado a un estado incapaz y a una sociedad sin norte.
*Profesor Universidad de Cartagena
crdc2001@gmail.com
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