La piel no es sólo un órgano que nos cubre y nos presenta al medio externo, la piel es el órgano de interrelación más complejo, tanto anatómica, como funcionalmente.Una persona de talla normal tiene aproximadamente 1,85 metros cuadrados de piel, con un volumen de 4.000 cc y un peso de 4.2 Kg. y con unos 1800 cc de sangre. Su superficie al tacto es lisa, suave, resistente, flexible, elástica, tersa y turgente.
Pero hoy nos referiremos al color de la piel y lo comenzaré refiriendo un cuento o mejor un chiste que se produjo entre la discusión entre un hombre blanco y un hombre negro.
El negro le dice al blanco: oye, tú cuando naciste tu color era rosadito, después te pusiste blanquito, cuando te pones al sol, te pones rojo; si te da miedo, te tornas pálido y si tienes frío, morado y te pregunto, ¿cómo así que tú me llamas a mí de color, si yo siempre he tenido uno, el negro?
No sé si te produjo risa, pero, saquémosle a este cuento su enseñanza:
El color de la piel variará según la región que observemos y estará dado por cuatro biocromos. Cuando digo biocromo, me refiero a sustancias que ayudan al pigmento la piel y son ellos, los carotenos, la melanina, la hemoglobina y la oxihemoglobina.
Hablando de la melanina, podemos decir que es el biocromo esencial para identificar las razas y el fototipo, o sea cómo reacciona la piel ante la exposición al sol, de cada persona.
En este orden de ideas, podemos afirmar que hay 6 tipos de piel y cada una se relaciona con el sol, esa relación es a lo que llamamos Fototipo.
La piel tipo I, que se puede decir pertenecen a los blancos blancos, los cuales quedan muy pocos después de tantos cruces, este tipo se quema fácilmente y severamente y no se broncea y su apariencia por lo general además de clara, se acompaña de pecas y casi siempre quienes la poseen son de ojos azules.
La piel tipo II, que son los blancos nuestros, se queman también, pero se broncean pocos y pensar que estas son las que más asisten a las cámaras bronceadoras. Los ojos pueden ser azules, verdes o marrones.
La piel tipo III y IV, es la piel latina o mejor, la piel caribe, se quema moderadamente y broncea bien, como dicen, cuando salen de la cámara de bronceo, quedan chéveres. Desde este fototipo en adelante los ojos y cabellos son oscuros.
La tipo V, son los negros nuestros, se queman rara vez y el bronceado bueno y duradero.
Los tipo VI, son los negros africanos o los negros (moyetos) americanos, esta piel nunca se quema y su bronceado es marcado.
Con los anteriores, ya sabes cuál es la diferencia entre piel blanca y negra y sobre todo las ventajas y desventajas de cada una, por lo tanto cuida la tuya si eres blanco y deja al negro quieto.
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