Columna


Esperar a ver

RUDOLF HOMMES

25 de marzo de 2018 12:00 AM

Algunos medios y los equipos de propagando del Centro Democrático quisieran que ya estuviera todo consumado y se posesionara Iván Duque por aclamación, basados en las encuestas de esta semana que le dan al candidato de la derecha más del 40 por ciento de la intención de voto. Ya están diciendo que nos ahorremos los $250,000 millones de la segunda vuelta, y los lentejos de todos los partidos le hacen cola a Duque para quedar en la lista de receptores de la mermelada.

La realidad no es tan sencilla. Si sumamos la intención de voto de Duque, Vargas y Viviane Morales, la derecha tiene entre el 51 y el 53 por ciento de la votación a su favor. Petro y los de centroizquierda tienen del 42 al 43 por ciento. Mas de la mitad de esta intención de voto esta con Petro. Pero si se unen Fajardo y de la Calle, quizá lo alcancen y ojalá lo superen. Vargas o Viviane no parecen tener chance en la derecha, pero los votos de ellos no se van todos para donde Duque, y quizá ellos mismos adhieran después a una alianza de centro. Cualquiera de esos escenarios lleva a pensar que los votos de la derecha no serán muy superiores a los de la izquierda y el centro sumados.  

Parece que el candidato de la derecha será Iván Duque, pero las cosas no se han resuelto en los otros bandos. Según estas encuestas, Petro podría pasar a la segunda vuelta, pero si sucede, la gran mayoría del voto se movería en la segunda vuelta a favor de Duque por miedo. Si se unen de la Calle y Fajardo, con seguridad harían un mejor papel en la segunda vuelta. Jugaría a su favor otra aprensión que latente: a la gente no solo le preocupa que Petro trate de perpetuarse en la Presidencia si lo eligen; también le inquieta que si gana Duque, Uribe podría querer atornillarse. Estos temores pueden favorecer a la alianza de Fajardo y de la Calle, en la primera vuelta por el miedo a Petro, y en la segunda por el miedo a Uribe.

De aquí a junio pueden suceder muchas cosas. Lo primero para resolver es si de la Calle y Fajardo son capaces de converger. Siendo ambos inteligentes y responsables, no se puede suponer que le entregarán en bandeja a Duque la Presidencia, pero se pueden enredar en los detalles de la alianza y en el mecanismo para seleccionar al que se retire. Las encuestas le dan ventaja a Fajardo y eso facilitaría el acuerdo porque él puede arriesgarse un poco más. Al fin y al cabo, tiene que haber aprendido que por no haber accedido a la consulta este mes, no tienen eso resuelto y le han dado innecesariamente una ventaja a Duque.

También es posible que Vargas surja de sus cenizas y que con la mermelada que le queda a Santos, el apoyo de la maquinaria y el clientelismo y la plata de los cacaos, le gane la batalla a Duque en la primera vuelta, o pase a segunda vuelta si Fajardo y de la Calle no se unen. Otro escenario, muy improbable, pero se debe contemplar, es que Petro decida ser el López Pumarejo de su generación, y espere cuatro años para llegar a la Presidencia, como hizo López, previendo una feroz oposición de los conservadores. ¡Esperar a ver!

*Economista
rhommesr@hotmail.com

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