El grupo terrorista Estado Islámico (EI) ha decapitado a un tercer ciudadano británico llamado David Haines, quien era un periodista y trabajador humanitario afirmando que lo había hecho “…por ser perro faldero de Cameron quien llevará a su pueblo hacia una guerra sangrienta en la que no podrás vencer…este hombre británico tiene que pagar el precio por tu promesa de armar a los combatientes Kurdos contra el estado Islámico”.
“EI” tiene un control significativo de territorio en Siria e Irak y suficientes recursos económicos y armas como para desafiar al imperio de Estados Unidos, Francia e Inglaterra que son los que apoyan la causa para poder enfrentar y desafiar a los islamistas radicales que quieren hegemonizar a su vez a todo el extremismo árabe del Estado Islámico.
Por lo pronto los países involucrados en este viejo conflicto son USA, Francia, Holanda, Irak, Irán. Italia, Rusia, Japón, Jordania, Omán, Líbano, Reino Unido, Turquía, ONU, Liga Árabe y Unión Europea, siendo el estado de Israel la punta de lanza contra los palestinos de la Franja de Gaza que ha sido el territorio asignado a estos que luchan por vivir en paz. Irán habla de una guerra santa de una manera radical a través de musulmanes Chiitas que para los Sunitas, son una secta que debe ser marginada e Israel feliz como punta de lanza del imperialismo USA que se considera el policía del mundo y que debe iniciar su participación en esta nueva guerra ajena.
El intervencionismo de USA ya es tradicional pero su presidente Obama ha dicho que solo bombardearán desde el aire y promete no enviar soldados a este ancestral conflicto en donde demuestra que todavía sigue vigente la violación a los derechos autónomos territoriales y en la vieja práctica de inmiscuirse en países y territorios allende a sus mares.
¿Hasta cuándo vivirá la humanidad ésta amenaza permanente del país más poderoso de la tierra interviniendo cuando le venga en gana en los asuntos internos de otros pueblos? ¿En que quedan los principios universales del no intervencionismo?
Nada: el respeto a la libre autodeterminación de los pueblos sigue siendo uno de los principios más violentados en los últimos setenta años de historia del mundo y en el trasfondo, todos sabemos que está en juego como casi siempre, el deseado petróleo y el ansia de dominación y opresión a los pueblos marginados de sus propios territorios.
Quiera Dios iluminar a los dirigentes de los países occidentales y orientales para que no se vaya a degenerar este conflicto en una larga, costosa y opresiva guerra marginadora e injusta que puede poner en jaque el futuro de la humanidad.
rvelezpareja@yahoo.com.co
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