No ha pasado un año desde que fue elegido el alcalde Dionisio Vélez y desde ya se vislumbran campañas para la próxima alcaldía de Cartagena. Causa curiosidad el mensaje que el concejal de Cartagena Quinto Guerra envía a la ciudad a través de sus redes sociales. En la cuenta en Instagram @quintoguerrav podemos ver una foto donde aparece al lado del hijo de Piedad Zuccardi (cuando este “delfín” hacía campaña al senado) y debajo de la foto el concejal escribe el siguiente comentario “Alfonso Anaya presentando a Andrés Felipe García candidato al Senado y socializando nuestro proyecto a la Alcaldía de Cartagena”. De igual forma, en su cuenta en Twitter @quintoguerra se puede leer un tuit escrito el 5 de Abril, donde nos dice “Sigue la Quintomanía en toda Cartagena” e inmediatamente sube una foto donde hay un par de señores pegando una calcomanía en un camión (a propósito de la “quintomanía” de la que habla el concejal, no pude dejar de relacionar este mensaje con el usado por Ñoño Elías en su pasada campaña, donde se hablaba de la “ñoñomanía”.)
En declaraciones para este periódico, el concejal Guerra dijo “No estamos haciendo campaña, estamos socializando nuestro nombre, concertando con las personas una buena propuesta para darla a conocer más adelante” pero más allá de este afán por emitirle a la ciudad un mensaje al respecto, que se puede evidenciar de un concejal que pareciera que ocupa gran parte de su tiempo en este tipo de actividades “preelectorales”, queda en el aire la inquietud de que si a la luz de la Ley 1475 de 2011 cuando trata sobre la propaganda electoral y que reza: “La propaganda a través de los medios de comunicación social y del espacio público, únicamente podrá realizarse dentro de los sesenta (60) días anteriores a la fecha de la respectiva votación.”, estaría o no el concejal infringiendo esta disposición ¿Qué tienen para decirnos las autoridades competentes al respecto?
Quinto Guerra debería mostrarnos su gestión en el concejo, las cosas que ha conseguido para la ciudad, las peleas que ha llevado contra la corrupción, que nos aclarare qué tan cercano es a la familia García Zuccardi, antes de querer volvernos “quintomaníacos” con su “quintomanía”. Así las cosas, le solicitamos de manera respetuosa, no solo al concejal Quinto Guerra, sino a todo aquél servidor público que tenga intenciones de aspirar a la alcaldía o a cualquier otro cargo, que respeten los espacios, que se dediquen con esmero y seriedad a realizar las funciones que en realidad les competen. No los queremos ver “distraídos” en campañas políticas, los queremos ver trabajando por la ciudad y ejerciendo con seriedad las funciones para las cuales fueron elegidos, de lo contrario sean honestos y renuncien, pero no se aprovechen de su condición para hacer un aparente proselitismo. Muestren desde ahora un juego limpio.
*Abogada y activista
rebecacolumnista@outlook.com
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