Desempleo, pobreza e indigencia

Durante el mandato del presidente Uribe ha crecido el desplazamiento forzado en más de 4 millones de colombianos, el desempleo, la pobreza, la indigencia, la desnutrición y prostitución infantil; el cierre de hospitales y clínicas públicas que originaron el paseo de la muerte, la privatización y liquidación de empresas, bancos y entidades estatales más rentables del país. Aliado con sus perversos asesores, dedicó meses largos de sus funciones presidenciales en la planificación de toda clase de artimañas y triquiñuelas, para lograr que una mayoría pírrica de los congresistas uribistas de bolsillo, inescrupulosos, sin moral ni ética, aprobaran la Ley del Referendo para la reelección presidencial; utilizó la más aberrante y descarada corrupción, rompiendo con todo orden constitucional, legal y moral en su ambición de perpetuarse en el poder para favorecer los intereses de los grandes capitalistas nacionales y extranjeros, especialmente a los monopolios norteamericano, entregándoles las empresas más rentables y las riquezas de nuestro país como si Colombia fuese una finca de su propiedad. No obstante la manipulación que el Ejecutivo ejerce en la mayoría de entidades y funcionarios públicos, entre las que se encuentra el DANE, no ha podido ocultar la realidad de la situación difícil que afecta a la mayoría de la población por la implementación de la política gubernamental del crecimiento del desempleo, la pobreza y la indigencia. Estas no se subsanan ni se eliminan con las limosnas que está entregando a través de los planes de Familias en acción, guardabosques, etc. Mientras, a los empresarios y grandes capitalistas los exonera del pago de billones de pesos en impuestos que se convierten en millonarias utilidades que van a parar a los países de origen de las empresas extranjeras convirtiendo a Colombia en exportador de capitales, esto demuestra que Uribe es el representante en Colombia de los intereses del capital internacional y del imperialismo norteamericano. Para la CUT, lo que necesita nuestro país y la mayoría del pueblo, 30 millones de colombianos, para mejorar sus condiciones de vida, no es una economía de guerra, sino la puesta en práctica de políticas verdaderamente sociales, generando empleos estables con salarios justos que nos permitan vivir dignamente como seres humanos y no como mendigos, educación gratuita hasta el nivel superior, atención integral en salud con entrega de medicamentos y vivienda digna; Colombia es uno de los países más ricos del mundo, cuenta con los recursos necesarios y facilidades para cumplir con estas responsabilidades sociales. Dan vergüenza y asco las atrocidades, descaros y cinismo del Gobierno. La mayoría uribista y algunos medios masivos de comunicación, se han dedicado a encubrir y justificar las acciones de un gobierno corrupto que se ha visto envuelto en grandes escándalos de toda índole, poniendo en entredicho la transparencia de la democracia Colombiana. La mayoría de congresistas está al servicio de los intereses de una persona y del gran capital nacional y extranjero. El Congreso debería estar dedicado a impulsar y aprobar leyes encaminadas a solucionar los grandes problemas del pueblo y a los trabajadores, cumpliendo entre ellos con el artículo 53 de la C.N., aprobando la ley del estatuto del trabajo que desde hace más de año y medio se encuentra durmiendo el sueño de los justos en esa corporación. *CUT BOLÍVAR cutbolivar@gmail.com