Columna


Falsos positivos al sindicalismo

GIL ALBERTO FALCÓN PRASCA

25 de junio de 2010 12:00 AM

GIL ALBERTO FALCÓN PRASCA

25 de junio de 2010 12:00 AM

El informe mundial de la Confederación Sindical Internacional (CSI), a la que pertenecen la CUT, CTC y CGT, dice que en el 2009 asesinaron 48 sindicalistas en Colombia, y este año van 32 asesinados. Así, en Ginebra, del 1 al 19 de junio 2010, la 99ª reunión de la (OIT) discutió en la Comisión de Normas, si era necesario tener a Colombia entre los 25 países violadores de los derechos de los trabajadores, para que la organización de la ONU vigilara la situación. El Gobierno y los empresarios propusieron sacarla, con el apoyo de los capitalistas de otros países y de la (CGT), en cabeza de Julio Roberto Gómez. Así, Colombia fue excluida, como si no pasara nada. Fue un salvavidas al Gobierno uribista, y los medios no escatimaron elogios para el “dirigente” sindical, Julio Roberto Gómez, por apoyarlos. También Angelino Garzón apoyó el TLC con EE.UU, Canadá y la Unión Europea. Como representante del Gobierno ante la OIT, sostuvo que a los sindicalistas en Colombia nadie los persigue, y los derechos de los trabajadores son plenos. Estas posiciones, más radicales que las de los ultraderechistas, sirvió para que inteligentemente, JM Santos lo convirtiera en vicepresidente de la República, enviando un mensaje a la comunidad internacional de que Colombia tiene como vicepresidente a un ex sindicalista, que al igual que Lula, defiende los DDHH de los trabajadores. Se olvidaron los oportunistas Angelino y Julio Roberto, que hay (CTA), (OPS), 2.700 sindicalistas asesinados, contratos precarios, alto desempleo y subempleo, la economía tomada por multinacionales que atacan aún más, y violan los derechos constitucionales laborales. No sólo las mafias y el paramilitarismo permean las instituciones, sino también “sindicalistas” como estos personajes, que nunca han sido ajenos al Gobierno de turno, sino camuflados con un lenguaje socialista en el sindicalismo y los partidos de izquierda, tipificándose como otro falso positivo de los gobiernos neoliberales al movimiento sindical colombiano. Como PDA, seguimos en el día a día, ganando el voto de opinión para las elecciones del 2011, y abriendo paso a nuevas figuras políticas, preparadas para entender y resolver los problemas estructurales del país. Tenemos candidatos de lujo en todos los municipios, como Wilson Borja, para la Alcaldía de Cartagena; Dionisio Miranda, para la Gobernación de Bolívar; Esteban Barboza, para el Concejo, por citar sólo algunos. No toda la dirección de la CGT es oportunista; la mayor Central en los 1.101 municipios es la CUT, razón por la cual la CGT y Julio Roberto no son la vocería de la clase trabajadora colombiana. Como partido de oposición, sentimos los sufrimientos de nuestro pueblo, que vive en la miseria. Seguiremos denunciando si el santismo también desprecia a los desplazados, si la corrupción sigue como política de Estado a través de los amigos que financiaron la campaña, quitando salud, educación pública, vivienda digna, protección a niños, mujeres, jóvenes y ancianos. Sabemos que el santismo continuará la tarea no cumplida por Uribe: acabar el PDA, pero a la luz de los derechos fundamentales, seguiremos articulándonos desde el campo social, la movilización y la lucha para exigir las garantías como oposición, conforme a las sentencias de las altas cortes. *CUT BOLÍVAR cutbolivar@gmail.com

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