En Cartagena se recicla poca cantidad de basura, lo que aumenta el volumen de residuos sólidos que da al relleno sanitario e incrementa la posibilidad de plagas porque numerosos bichos sacan a la superficie los lixiviados y demás sustancias contaminantes, haciendo más difícil aprovechar los terrenos para otros usos y reduce la vida útil del relleno.
En Caldas pusieron en marcha algunas estrategias a bajo costo para descontaminar y evitar dañar las tierras donde se depositan los desperdicios.
Aquí debería aprovecharse esa experiencia, y se tendría un sitio más adecuado para disponer de los residuos, al tiempo que se adapta ese terreno para clausura y futuros usos, entre ellos, construir vivienda. Es rentable e higiénico aprovechar los elementos de la basura. Si todos nos acostumbramos a separar los metales, el vidrio, el papel y el cartón de las sustancias orgánicas, produciremos menos desperdicios, ahorraremos en su disposición final y contribuiremos a que más gente pueda vivir de la basura, como en otras partes del mundo. Si no reciclamos, seremos con el tiempo en un muladar en cuya basura nos ahogaremos.
La experiencia de Caldas nos puede servir para hacer un relleno más útil e higiénico, lo cual, combinado con el reciclaje, hará de esta ciudad un modelo de disposición de residuos. Así evitaremos que nos cubran los desperdicios y construiremos una ciudad más amable.
¿Qué hicieron en Caldas? Mediante una red de tuberías de plástico que atraviesa las montañas de basura, se evita la formación de lixiviados, de manera que el terreno donde se compacta la basura es más estable y se evitan las explosiones accidentales excepto para espantar los gallinazos y otros animales que desordenan los desperdicios y evitan que haya orden en la compactación. En la empresa que se ocupa de manejar el relleno hay 423 empleados, sin contar los que se dedican a clasificar aquellos elementos que puedan ser aprovechados entre la montaña de residuos, 18 personas se encargan de la disposición final de los desechos corrientes y el relleno recibe basuras de 12 municipios, aprovechando al máximo sus ventajas. En los próximos meses invertirán unos 2 mil millones de pesos para un sistema para purificar lixiviados y reciclar el agua.
En un mes, Emas, la empresa que maneja el relleno sanitario de Manizales y otros municipio de Caldas, tendría un nuevo terreno de 50 hectáreas para disponer basuras, prolongando la vida útil por 30 años, en la vereda Sierra Morena del corregimiento Manantial del municipio de Neira, en la región centro sur de Caldas y que limita con La Esmeralda. En este lote se invertirían cerca de mil millones de pesos.
El relleno de Emas, llamado de La Esmeralda, tiene una vida útil de 6 años más y como su Plan de Manejo incluye programas para mitigar el impacto de las basuras, a esas tierras se les ha sacado todo el provecho posible. Deberíamos imitarlos.
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