La mayoría de los dirigentes políticos y líderes empresariales considera certeramente que la educación es la única manera de salir de la inmensa pobreza que nos agobia, pero muy pocos de ellos están ejecutando proyectos concretos para materializar esa consideración. Sobre todo, muy pocos se han centrado en la médula de un sistema educativo eficiente y útil: la investigación. Se está haciendo el mayor esfuerzo en formar profesionales, que después no tendrán trabajo, pero no hay compromiso ni apoyo para la preparación de investigadores que se ocupen de solucionar nuestros grandes problemas con metodología científica y criterio realmente innovador. Los pocos programas que hay no son suficientes.
Numerosos profesores han manifestado su preocupación por la falta de investigación y criterio de los jóvenes estudiantes de las universidades, generalmente porque en lugar de una búsqueda sistemática de conocimientos en las fuentes originales y seria, la hacen a través de las redes sociales y en general de las páginas de internet, muchas de las cuales no tienen la legitimidad necesaria para confiar en ellas. El semiólogo y escritor Umberto Eco hizo recientemente una radiografía de estas plataformas irresponsables, calificándolas de una forma de darles notoriedad a los tontos.
Las páginas de los medios de comunicación están diseñadas tanto para informar como para entretener. De manera que no se les puede exigir que publiquen tratados profundos y exhaustivos sobre cada uno de los asuntos que tocan. Deben, eso sí, decir la verdad siempre y documentarse adecuadamente, para servir de guías y orientadores, como es su misión. Pero hay sitios web, que sin ser de universidades, instituciones académicas o centros de conocimiento, se dedican a especular sobre temas de los que no conocen, y muchos estudiantes se basan en ellos para realizar sus trabajos, contribuyendo de esa manera a propagar la confusión y el error.
El año pasado, la consultora internacional Asociación para la Investigación del Consumidor –GFK, por sus siglas en alemán- realizó un estudio, cuya principal conclusión fue que los jóvenes de secundaria acuden a internet como principal medio de consulta en sus investigaciones académicas, y lo peor es que no van a las páginas especializadas en lo que están indagando, sino a los miles de sitios creados para ayudar en las tareas escolares, con lo cual se libran de una enorme cantidad de trabajo creativo y contribuyen a privilegiar el facilismo y la pereza. En Latinoamérica, según los resultados de la investigación, las páginas más visitadas por los jóvenes son El Rincón del Vago, Wikipedia, Yahoo Answers y Taringa.
Los estudiantes, de esa manera, hacen el menor esfuerzo y no podrán encarar la producción de conocimiento útil a la sociedad, pues no están profundizando ni aplicando ningún tipo de método académicamente adecuado para investigar.
Numerosas instituciones universitarias y de investigación plantean la necesidad de aplicar el método científico en las aulas. Incorporar esta metodología debe hacer parte de las políticas educativas de aquí en adelante, y estar incluida en todo plan de desarrollo.
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