Editorial


La vía de Bayunca a Pontezuela

EDITORIAL

23 de enero de 2014 12:02 AM

La Gobernación de Bolívar anunció que adjudicó la pavimentación de los 7,17 kilómetros de la carretera entre Bayunca y Pontezuela, que desemboca en la Vía del Mar y que costará $9.600 millones. Este es un gran paso dado por la Gobernación para el progreso del área rural de Cartagena.

Esta carretera es indispensable para el bienestar de los pueblos que están sobre ella, Bayunca y Pontezuela. También es un corredor de desarrollo del Distrito en el que hay instalaciones importantes de educación y de recreación para los trabajadores afiliados a Comfenalco, al igual que restaurantes, urbanizaciones y y fincas de recreo.

Esta carretera fue destruida principalmente por el tráfico de volquetas de alto tonelaje que se mueven cargadas entre las dos carreteras y es indispensable que las especificaciones para reconstruirla tomen en cuenta este tráfico pesado. Nada sacaríamos con que el Departamento hiciera este esfuerzo si pronto sería destruida de nuevo la vía por las mismas causas que dañaron la carretera antigua.

Esta vía no solo es importante para mover relleno de las canteras aledañas a La Cordialidad, sino que es el paso natural de los vehículos que van hacia el norte de Barranquilla desde la Troncal de Occidente y toman La Cordialidad para luego cruzar por Bayunca hasta la Vía del Mar. Esta ruta permite evitarle a este tráfico la obligación de entrar y cruzar a Cartagena para luego salir por Crespo y La Boquilla hacia el peaje de Marahuaco.

Igual ocurre con el tráfico que viene del norte de Barranquilla hacia la Troncal de Occidente y se vale de este cruce para acortar camino y evitar entrar a Cartagena. Así, estos 7,17 kilómetros le evitan a Cartagena una congestión muchísimo mayor.

Arreglar esta vía debería incluir ponerle fin al caos que hay en Bayunca con motivo de los bares y cantinas que en la entrada del pueblo, que ocasionan el parqueo de vehículos donde no deberían hacerlo y también incrementan la cantidad de peatones que cruzan irresponsablemente de un lado a otro del incio del tramo mencionado y también de La Cordialidad, quitándole fluidez al tráfico e incrementando la posibilidad de que algún transeúnte sea atropellado por cualquier vehículo.

También deberían moverse las autoridades contra el caos del ruido causado por la multiplicidad de equipos de sonido a todo volumen tanto en Bayunca como en Pontezuela, quitándole la posibilidad de descansar a la mayoría de los habitantes solo porque unos pocos desconsiderados quieren oír música a decibeles estridentes y malsanos. En este último  pueblo, sus habitantes se amontonan sobre la vía frente a los bares, ocupando a veces toda la calzada, lo que es un gran riesgo para peatones y conductores.

Los contratistas deberían aprovechar los dos meses de verano franco que quedan para arrancar las obras cuanto antes, no sea que por cualquier motivo desperdicien tiempo seco valioso y terminen trabajando a medias como consecuencia de las próximas lluvias.

 

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