Editorial


Los foros del Caribe

En Barranquilla concluyó ayer el IX foro del Caribe colombiano, una herramienta para fortalecer la región a través de tratar de satisfacer sus necesidades comunes, que son muchas, y, pensamos nosotros, crear un clima favorable hacia apoyarse las distintas ciudades y departamentos para lograr sus objetivos más locales. El Caribe siempre ha sido el perdedor en el reparto del presupuesto nacional, no solo por la mucho mayor influencia de los departamentos andinos al asignar el Gobierno las partidas presupuestales, sino también por la incapacidad de gestionar proyectos, que ha sido la regla en estas latitudes. Afortunadamente, Bolívar lleva dos gobernadores que han sido activos y eficientes al gestionar recursos ante el ente central.

El foro llegó a diez conclusiones, que se podrían resumir así: 1) lograr una visión integral del Caribe y desarrollar una estrategia común para solucionar sus problemas; 2) se elaboró entre actores públicos y privados una hoja de ruta para incorporar al Plan Nacional de Desarrollo de quien sea elegido presidente; 3) llegar a consensos acerca de lo trascendental para la región, como la energía eléctrica y demás servicios; 4) la importancia para el Caribe de una buena educación pública y privada, mejor y con más cobertura; 5) establecer una agenda regional para cerrar la brecha social; 6) agradecieron al candidato Iván Duque haber asistido y adoptado la hoja de ruta del Caribe, y se le envió a Gustavo Petro la misma documentación para conocer sus respuestas antes de las elecciones; 7) seguir propiciando espacios de reflexión y debate del Caribe continental e insular; 8) se deploró la falta de decisión del Gobierno central para con las necesidades socioeconómicas del Caribe; 9) la ESAP y demás universidades de la zona ampliarán el conocimiento de la región y sus soluciones, para fortalecer y defender la identidad y autonomía de los ocho departamentos del Caribe; y 10) continuar construyendo agendas comunes que contribuyan a las políticas públicas y proyectos para la región Caribe para una efectiva participación y movilización social.

Esta clase de reuniones naturalmente tienen mucho de aprendizaje y habrá mucho que modificar a medida que se hacen otras, pero la programación de estos eventos debería tener la intención de pasar a programas más concretos con mayor velocidad. Las distintas regiones del Caribe tienen que sincerarse para evitar conflictos por los intereses legítimos de cada una, y encontrar los asuntos que le son indispensables a todas, como son la mayoría de las 10 conclusiones a que llegó el foro más reciente.

Concentrarse en propuestas prácticas para luchar por reducir la inequidad dentro de la región Caribe y de esta con respecto al resto del país por la injusta asignación del presupuesto nacional; mejorar los servicios públicos domiciliarios; la educación; y la salud pública, serían ya unos frentes de trabajo indispensables para llevar bien preparados al próximo foro para poder pasar a la acción de inmediato.  

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