No sabemos cuántos editoriales le hemos dedicado a través de los años a la movilidad en Cartagena, o mejor, a su inmovilidad por todas las causas conocidas: la indisciplina de conductores y peatones de todos los estratos; la falta de policías suficientes y por lo mismo de autoridad; las pocas vías; y el mal estado de muchas de ellas.
Impresiona mucho ver la falta de consideración de personas de estrato alto orilladas en cualquier vía arteria y a cualquier hora, pico o no, hablando por celular, recogiendo o dejando a alguien o intentando parquear. Y ni hablar de los taxis, mototaxis y busetas. ¡Que entre el diablo y escoja!
Ahora Cartagena está próxima a sufrir muchos más trancones, aun sin las restricciones viales por los eventos internacionales y por las medidas de seguridad cuando nos visitan personajes nacionales y extranjeros.
Afortunadamente, habrá una buena razón para el padecimiento: la Alcaldía se dispone a reparar e intervenir más de 246 tramos viales de aquí al fin de la administración Vélez. Ya hay 63 obras adjudicadas y listas para intervenir en los próximos 15 días según el Secretario de Infraestructura, y 46 de estas son vías que sumarán 13 kilómetros y costarán 23.712 millones de pesos.
En este grupo están la calle de El Arsenal, calle San Agustín Chiquita, la calle 70 y la carrera 9 de Crespo, el puente de Las Palmas en Manga y el puente Heredia, además de las calles 47 y 48 de Marbella. Ya la avenida de La Asamblea, en Manga, tiene un tramo en plena obra.
Todas las de arriba son obras neurálgicas y provocarán trancones inmensos que los cartageneros tendremos que soportar del mejor humor posible, sobre todo porque al fin el parque automotor rodará por superficies mejoradas. Además de las obras en sí, hay el riesgo de las sorpresas que se puedan encontrar en una ciudad cuya infraestructura tiene muchas partes abandonadas: tubos del acueducto o del alcantarillado viejos y dañados, acometidas eléctricas defectuosas, desagües tapados, en fin, cada “imprevisto” demorará las obras. Ojalá que la Alcaldía informe oportunamente a la ciudadanía acerca de cada caso. El alcalde Vélez le advirtió a El Universal que todos estos trabajos serán apenas un porcentaje pequeño de las vías que se necesitan, pero se notará la diferencia.
Por otro lado están las obras que hacen parte del crédito de 250 mil millones, tomado por el Distrito, de los cuales 80 mil millones son para unas 200 vías que aún no han sido adjudicadas.
El alcalde Vélez le dijo a El Universal que es casi imposible manejar 246 contratos y auditorías independientes, y que se licitarán estas obras en paquetes que incluirán varias para poder dejarlas listas en su administración.
Ojalá se haga acompañar de las “ías” en estos procesos para evitar dolores de cabeza, ya que a juzgar por experiencias pasadas, no faltará el campo minado de las maledicencias y denuncias, aun si hace todo bien.
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