El 31 de enero de 2011, hace casi 6 años, hubo un fallo del Tribunal Administrativo de Bolívar, luego reiterado por el Consejo de Estado, que obligaba al Distrito a trasladar el mercado de Bazurto, en febrero de 2016.
De allá para acá se ha hablado mucho, como que el mercado se distribuiría en tres, incluyendo al propio Bazurto; la parte más grande, con 26 hectáreas, sería vecina a la Terminal de Transportes, frente a El Pozón; y la tercera en Santa Rita, mercado que está próximo a comenzar a trabajar. En 2014 se hablaba de 2 mil comerciantes censados, de los cuales 1200 ocupaban el espacio público e hicieron un acuerdo con el Distrito, mientras los mil restantes son adjudicatarios formales del mercado.
Hace 11 meses, el 22 de febrero de 2016, una nota en El Universal decía:_“Que el Juzgado 12 Administrativo Oral del Circuito de Cartagena y luego el Tribunal Administrativo de Bolívar ordenaran el traslado del mercado de Bazurto no ha sido suficiente para que la central de abastos sea reubicada”. También se dijo allí que durante la ya pasada administración de Dionisio Vélez se compró el predio “donde se construirá el nuevo mercado en el barrio El Pozón”, aunque “(...) el diseño arquitectónico de éste fue calificado por la Defensoría del Pueblo como inconcluso”, además de que su cerramiento quedó a mitad de camino. La misma nota citaba al alcalde Manolo Duque diciendo que trasladar el mercado era prioridad de su gobierno.
El 4 de noviembre pasado, publicamos otra nota que anunciaba que “Hasta el 30 de noviembre tiene el Distrito para presentar el cronograma definitivo para el traslado del mercado de Bazurto. En el mismo plazo deberá entregar: estudio técnico sobre restricción de vehículos en el barrio Martínez Martelo, y un estudio sobre el cierre del mercado de Bazurto previa concertación con la comunidad”, y también se decía que “(...) se determinó que el traslado del mercado debía hacerse dentro de la actual administración”, es decir, la de Duque. También se anunciaba la próxima audiencia para el 17 de febrero de 2017 a las 9 de la mañana, cuando el Distrito debería presentar varias tareas cumplidas.
Sin embargo, ayer El Universal retomaba la problemática de Bazurto y decía que el Barrio Martínez Martelo, aledaño al mercado, está en crisis porque las ventas ambulante, los camiones y todas las características del mercado, incluidas las basuras, el ruido y la inseguridad, se están tomando las áreas residenciales. En cualquier calle se descarga un camión, y las fondas de mala muerte avanzan hacia las casas de habitación.
Las distintas administraciones de Cartagena no pueden seguir tirándose la pelota unas a otras sin trasladar este mercado, que cada vez crece más y sin control, perjudicando a sus moradores. Es indispensable recuperar esta área, lo que traerá grandes ventajas en movilidad para toda la ciudad, y en seguridad y tranquilidad para los barrios residenciales aledaños.
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