De política se hablará mucho en 2014, no solo porque las elecciones legislativas y presidenciales se realizarán en el primer semestre de este año, sino además porque hay varios acontecimientos que mantendrán al rojo vivo la polémica. Será un año político caiga cara o sello en la moneda. Todo estará marcado por el debate político.
Nada de lo que haga o deje de hacer el Presidente reeleccionista será excluido del ruedo político. Si entrega una casa, ¿por qué la entregó?; si despide a la Selección Colombia al Mundial o cualquier amistoso, ¿por qué lo hizo?... Todos los mil y un acto que realice Santos en su año reeleccionista será comidilla para la oposición e incluso para quienes lo acompañan.
En contienda hay 2.441 candidatos que tendrán o necesitarán figurar con urgencia prometiendo el cielo, si es el caso, con tal de ocupar una de las 268 curules disponibles en el Congreso de la República.
Para completar, 2014 sería un año electoral similar a los del pasado, sino fuera por los varios personajes con los que compartirá el protagonismo las elecciones. En primera fila estarán el procurador Alejandro Ordóñez y el alcalde de Bogotá Gustavo Petro.
Bogotá y Petro serán la mezcla perfecta para la polémica. No solo por la sanción que le interpuso el jefe del Ministerio Público al mandatario de los bogotanos, sino, además, porque en marzo los capitalinos podrán ir a las urnas para votar por la revocatoria de su burgomaestre.
Por su parte, en las regiones, dependerá del procurador que se genere o no un hecho de magnitud nacional. En especial en Antioquia y en Bucaramanga, donde están abiertas investigaciones contra el gobernador Sergio Fajardo y contra los alcaldes de Bucaramanga, Girón, Floridablanca y Piedecuesta; en Santander. También afronta un proceso disciplinario el gobernador de Magdalena, Luis Miguel Cotes.
Paralelo con este debate, el proceso de paz que se adelanta con las Farc en La Habana, al que seguramente se unirá otro diálogo con el ELN, tendrán tantos defensores como detractores en la arena pública y todo pasará por el filtro político partidista.
Como si fuera poco, está pendiente la discusión de la ley ordinaria en salud, que ha sido fuente de manifestaciones, los acuerdos con los mineros, los cafeteros, los paperos, los transportadores, los campesinos, que este año seguramente saldrán a exigirle al gobierno lo pactado en la mesa.
LAS REFORMAS PENDIENTES
Todos los años se quedan proyectos relegados en el Congreso, cada periodo legislativo hereda cientos de iniciativas del anterior. Lo particular en este Congreso 2010-2014 es que a pesar de que la mayoría parlamentaria la ha mantenido el Gobierno del presidente Juan Manuel Santos, a través de la Mesa de Unidad Nacional, son pocas las reformas de alto calibre que ha logrado sacar adelante.
Primero, fue la reforma a la Ley 30 de educación superior, que se hundió; luego fue la reforma a la Justicia, que en un complejo juego constitucional se archivó; y el debate que está en la mesa es el del proyecto de la ley ordinaria en salud que si bien ya pasó sus dos debates en el Senado, aún tiene que hacer tránsito por Cámara de Representantes, en medio de una protesta ciudadana bastante grande, que se hizo sentir el año pasado a través de la famosa marcha blanca de médicos y que sin duda se verá impulsada en 2014 por las necesidades electorales de algunos candidatos. Otro asunto que está en proceso de debate es el impopular tema de la reforma pensional, al que seguro le darán largas para no cargar con esa bomba electoral.
GUERRA DE TITANES EN EL LEGISLATIVO
Ya se sabe quiénes aspiran por una curul en el Congreso y lo más probable es que el 9 de marzo próximo entren al Capitolio varios pesos pesados de la política nacional. Con lo que se asegura una discusión incansable que le bajará el tono a las decisiones en Presidencia para dársela a los debates en Senado, que es donde estará la mayoría de los titanes. Otra de las consecuencias de este futuro cercano de la política colombiana es que el canal del Congreso, tendrá un aumento del raiting de manera exponencial.
Ahora, hablando en específico, el hecho de que el expresidente Álvaro Uribe, acérrimo detractor del presidente, esté en la cabeza de la lista cerrada del Centro Democrático, pone en evidencia el grado de polémica que se generará en el Congreso. Y, si a eso se le suma el hecho de que el exgobernador Horacio Serpa es la ficha principal del Partido Liberal para las elecciones, que además la Alianza Verde va con el exgobernador Antonio Navarro, y que el Polo Democrático se la seguirá jugando con el senador Jorge Robledo, ya es suficiente para augurar un año en el que cada propuesta en el Congreso, por trivial que sea, será motivo de gran polémica.
PETRO SEGUIRÁ GENERANDO POLÉMICA
El acontecimiento político del año 2013 fue la destitución e inhabilidad del alcalde de Bogotá Gustavo Petro. Tan importante es, que ha dejado, a dos meses de las elecciones parlamentarias, en un segundo plano el debate electoral. Y tal parece que continuará la intromisión del tema Bogotá en la agenda política del país. También por cuenta de Petro, que además del caso de su destitución en la Procuraduría, tiene en la Registraduría un proceso de revocatoria que ya fue avalado y se llevará a cabo el próximo 2 de marzo. Este tema dará más de qué hablar si se tiene en cuenta que por un lado se trata de un alto cargo del Estado, que inmiscuye al presidente Juan Manuel Santos, que también estará en campaña.
Y además el implicado, Petro, es capaz de convocar a un número bastante alto de adeptos, que si bien no necesariamente es la mayoría de los bogotanos sí genera impacto. Ejemplo de esto fue la concentración de dos días en la Plaza Bolívar de la capital del país para apoyar al alcalde mayor. Entonces, el año político se alimentará de los debates capitalinos al menos durante el primer semestre, cuando se sabrá si el recurso de reposición que la defensa de Petro interpuso ante la Procuraduría, la conocerá el jefe del Ministerio Público, Alejandro Ordóñez. Y si esta dejará en firme la destitución.
PROCURADOR VS. FISCAL
Las peleas entre dos cabezas de importantes entidades del país no dieron tregua en 2013 y parece que tampoco lo harán este año. Se trata de las diferencias entre el fiscal Eduardo Montealegre y el procurador Alejandro Ordóñez, que van desde temas de paz hasta la destitución del alcalde de Bogotá, Gustavo Petro. Durante el primer semestre de 2013, la discusión se centró en el problema de la Justicia Transicional que se aprobó a través del Marco Jurídico para la Paz en el Congreso y es la base para que se pudieran desarrollar los diálogos en La Habana con la guerrilla de las Farc. Para Ordóñez, se trata de una norma que nos podría en peligro de que la Corte Penal Internacional (CPI) pudiera conocer sobre aquellos casos en los que no se penalice algún tipo de acción de los cabecillas de la guerrilla, que pudieran ser cobijados con rebajas de pena, o penas alternas.
Por otro lado estuvo el fiscal Montealegre que toma el principio de la paz como por encima de cualquiera otro, por lo que ha argumentado que la CPI no estaría en capacidad de intervenir en los asuntos que se presentaran en desarrollo del Marco Jurídico. La otra pelea entre Ordóñez y Montealegre se da por el caso Petro, en el que la Fiscalía inició una investigación preliminar contra el procurador.
LOS COLOMBIANOS EN LAS URNAS
Febrero tendrá una elección, marzo tendrá dos y mayo una. Eso, sin contar las consultas de partidos y si se lograra un acuerdo en La Habana para refrendarlo. Esto hace del 2014 un año con elecciones de varios calibres. Primero se les preguntará a los guaviarenses si quieren revocar el mandato de su gobernador José Octaviano Rivera Moncada el dos de febrero. Se trata de la primera vez que se logran recoger las firmas para pedir la revocatoria de mandato de un gobernador. Luego viene marzo que tendrá la votación por la revocatoria del alcalde de Bogotá Gustavo Petro. Para esto será necesario que los capitalinos salgan a votar y logren 1.234.214 sufragantes, de los cuales, la mitad más uno tendrá que votar por el sí en esta primera contienda de marzo. Una semana después, el 9, se viene la elección de Congreso, esta vez sí podrán votar todos los colombianos y allí se definirán y apaciguarán las fuerzas políticas en el país hasta que se vuelva a las urnas para elegir presidente, o reelegirlo, si es que llegara a ganar Juan Manuel Santos, como lo han dicho las encuestas. Ahí es cuando se sabrá cómo quedaron los pulsos políticos en el país.
LOS FALLOS DEL MINISTERIO PÚBLICO
Nunca una decisión de un procurador había sido tan polémica como la destitución del alcalde de Bogotá Gustavo Petro. Por ello, se ha vuelto polémica y expectativa nacional la decisión que Ordóñez pueda tomar en una investigación que adelanta contra el gobernador de Antioquia, Sergio Fajardo, por los títulos mineros que el mandatario otorgó al esposo de su exsecretaria de Participación, Beatriz White.
Este caso ante el ministerio público va apenas en su fase investigativa, por lo que faltaría tiempo para que se decidiera imputar cargos al mandatario regional o archivar el proceso. El tema cobra furor político, pues la destitución de Petro algunos sectores la miran como la decisión de Ordóñez de ir eliminando barreras por un supuesto interés suyo de llegar a la Presidencia. En los santanderes hay un caso similar que la Procuraduría fallaría en los próximos meses: la investigación disciplinaria a los alcaldes de Bucaramanga, Girón, Floridablanca y Piedecuesta para que informen sobre la situación que se presentó en 2011, cuando fue declarada la emergencia sanitaria ante el cierre de una celda adyacente al sitio de disposición final de basuras.
PAROS Y MOVILIZACIONES
Desde el paro de mediados de 2013, que generó problemas de orden público en varias zonas del país, el miedo que ha circulado por la Casa de Nariño es que pudiera repetirse la situación del año que acaba de terminar. Y si a la indignación común en las democracias se le suma un año electoral, se tiene un caldo de cultivo para que se generen nuevos intentos de movilización que, si el Gobierno atiende y no los niega, no tendrán mayor crecimiento. Pero el presidente Juan Manuel Santos, además, deberá contar con que varios de los que ayer fueron líderes de los sectores manifestantes, son hoy candidatos al Congreso o la Presidencia, que podrían usar su capacidad de movilización para generar un impacto que les permita acceder a esos cargos. Es el caso de Víctor Javier Correa, estudiante de Medicina de la Universidad de Antioquia, quien ha estado vinculado con las protestas del sector salud y de los cafeteros, y quien además, aspira a una de las 17 curules que le corresponden a Antioquia en la Cámara de Representantes. Y el coordinador del paro en el Catatumbo Alberto Castilla es otro que aspira al Senado. También está César Pachón, líder de Dignidad Papera, quien se lanzará por firmas a la Presidencia y además impulsa un movimiento agrario que aspira obtener otros cargos de elección popular.
RADIOGRAFÍA
SANTURBÁN Y SU PESO POLÍTICO
Desde que al país le interesa la minería a gran escala, es cada vez más valioso el tema como "capital político". En específico, las implicaciones ambientales de este tipo de proyectos de extracción. Y en este escenario político y ecológico, el nombre Santurbán resuena por todo el país. Allí se espera que el Ministerio de Ambiente defina hasta dónde se puede hacer explotación minera, y hasta dónde se considera zona de protección intocable para este tipo de actividades. Un tema con implicaciones sociales y por ende políticas.
PARA SABER MÁS
EL AUMENTO DEL UMBRAL ELECTORAL
Uno de los hechos que preocupa a los partidos políticos será el tema del umbral electoral, que es el mínimo de votos que tiene que sacar una colectividad en las elecciones del próximo 9 de marzo para mantener su personería jurídica y por ende recibir ayuda económica del Estado y poder dar avales. En las elecciones pasadas el umbral fue del 2 por ciento de los votos válidos de la contienda y para marzo subirá al 3 por ciento, cuestión que han criticado las minorías que se sienten amenazadas por el aumento.
EN DEFINITIVA
No ha pasado ni el primer mes de 2014 y ya se le tienen una lista de pendientes políticos que lo harán un año movido. La polémica empezará con elecciones, pasando por Petro y terminará en posibles paros.
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