El Centro Democrático enfila sus baterías para contrarrestar el sí al plebiscito.
Para ello, dos de sus figuras clave, Carlos Holmes e Iván Duque, y que se reconocen ya como precandidatos presidenciales de esa colectividad, revelaron en Cartagena sus estrategias en favor del no a los acuerdos de La Habana y el proceso de paz del presidente Juan Manuel Santos.
“Vine a Cartagena para avanzar en la movilización ciudadana a favor del no en el plebiscito”, dijo Holmes.
Apuntó que “votar a favor del no es votar porque haya paz en Colombia, es votar a favor de que se modifiquen acuerdos que son malos para el país y abrirle la puerta a acuerdos mejores para la Colombia; votar a favor del no es promover la unión porque el presidente Juan Manuel Santos nos quiere dividir en amigos de la paz y enemigos de la paz; el no ratifica la Constitución del 91 y con ello evitamos que haya dos constituciones, con la de La Habana”.
Para Holmes, el Centro Democrático está “a favor de la justicia y en contra de la acción de tribunales revanchistas; lo que queremos es que los culpables de masacres y secuestros paguen las sanciones adecuadas por esos delitos; el no es la posibilidad de evitar que esos victimarios puedan ser elegidos inmediatamente; el no es la democracia plena”.
“No somos guerreristas, porque queremos la paz, y no queremos que el proceso concluya, pero esos calificativos son producto de la división artificial promovida por Santos”, dijo Holmes.
Las razones de Duque
“Yo creo en el no porque el presidente Santos no puede pretender hacernos pronunciar a través de una sola pregunta habiendo tantos temas delicados en el país”, dijo por su parte el senador Iván Duque.
El congresista considera que el Gobierno se echó para atrás debido a que “en 2012 le propuso al país que los acuerdos iban a ser refrendados en un referendo; pero sucedió que los referendos necesitaban un voto informado con la claridad de los puntos de los acuerdos; y porque el referendo exige que participe el 25% del censo electoral, y como esto no le convenía, se cambió al plebiscito, el cual tiene muchas trampas”.
“La primera trampa es que bajaron el censo electoral al 13%; no tiene un voto en blanco; tampoco aceptaron prohibir la publicidad estatal; también se le permitió a los funcionarios públicos hacer campañas”, anota Duque.
Dice que es un falso dilema decir que el no representa la guerra. “Cuando decimos no decimos no a la impunidad, y rechazamos la elegibilidad política de los miembros de las Farc”.
“Los santistas
no dicen la verdad”
Asimismo el senador Fernando Araújo se refirió a la reunión en Cartagena para inaugurar la campaña del sí al plebiscito y aseguró que los “santistas no vinieron a hablar sobre la realidad de los acuerdos de La Habana, ni de la impunidad que produce nueva violencia. Hablan de la distribución de la mermelada”.
Agregó que “no se vino a hablar de cómo las drogas inundan a Cartagena. Se va a condicionar la inversión a cambio de la politiquería, de cómo derrochar la plata del posacuerdo”.
“Los santistas no van a mencionar que las FARC quieren convertir las zonas de concentración en pequeñas repúblicas socialistas. Van a omitir la verdad. No van a decir que van a traer soldados cubanos a Colombia. Van a buscar su provecho personal”, expresó Araújo.
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