Hablar de Francisco Santos o ‘Pacho’ Santos es como hablar de Álvaro Uribe Vélez, porque no sólo fue su compañero de fórmula durante los ocho años de mandato (2002-2010), sino porque es uno de los uribistas llamados ‘pura sangre’ que aún existen.
Esos rótulos del hoy candidato a la Alcaldía de Bogotá llevarían a pensar que su principal propuesta de gobierno sería la seguridad democrática, la que tanto ha lamentado el Centro Democrático que haya sido desmontada por el presidente Juan Manuel Santos, su primo, con quien ha controvertido de lleno por ese tema.
Pero no, la propuesta base hacia la Alcaldía que esgrime ‘Pacho’, como le llaman amigos y detractores, es la educación virtual. Asegura que es mucho más universal, porque permite que más estudiantes se puedan formar, baja costos y, ante todo, mejora la calidad. Esta idea, de la cual habla con propiedad, la repite día a día en las calles, en reuniones con la ciudadanía y, en especial, en los foros que cada día se realizan en Bogotá para que él y sus competidores convenzan a los electores de que voten por ellos el próximo 25 de octubre.
- ¿Cuáles son las principales preocupaciones que ha identificado tienen los bogotanos y para las que piden soluciones rápidas y de verdad?
Hemos hecho 70 talleres en todas las localidades y les pusimos a priorizar los problemas. El principal en la ciudad es la seguridad, ese es el que más daña la calidad de vida de los bogotanos. Perdimos los parques, perdimos los colegios. Nuestra política tiene un eje fundamental: devolver la seguridad a la ciudad. El segundo es otro que vivimos todos: la movilidad, por falta de gerencia, por mal manejo, por corrupción, por no hacer las obras, por eso Bogotá está paralizada.
- ¿Cómo identificarán los bogotanos, si usted es alcalde, que está mejorando la situación de seguridad?
Lo primero es hacer un consejo de seguridad diario, la primera semana haré siete consejos, no porque haya estallado una bomba, sino porque hay que medirle el pulso a cada una de las UPZ (Unidades de Planeamiento Zonal), los consejos serán ahí, porque allí se sabe dónde están las ollas, las organizaciones criminales, las pandillas a enfrentar.
- ¿De dónde sacará la plata para que operen la UPZ, las URI (Unidades de Reacción Inmediata), las estaciones de Policía?
Los recursos están; estamos haciendo una reacomodación presupuestal para montar una secretaría de seguridad que tenga un billón de pesos de presupuesto, vamos a construir centros integrales de justicia, se los vamos a construir a la Fiscalía, a los jueces, con lugares de retención y los espacios iniciales de judicialización, no el desastre de hoy en día.
- ¿Pero de dónde sacará esa plata?
Del mal gasto que hay hoy en día. Usted mira en que se están gastando los recursos y reapropia sin impactar programas sociales.
- ¿Su propuesta en movilidad cuál es, más allá de si hay o no metro?
Lo primero es hacer las obras que se dejaron de hacer hace mucho tiempo. Ya deberían estar hechas las obras en la 68, la Boyacá, la Calle 13, la Avenida Longitudinal, la Primero de Mayo y la Séptima, ninguna se hizo, nos va a tocar hacerlas a nosotros. Hoy en día podemos hacer muchas de esas obras con concesiones, el cierre financiero da. La Calle 13 la podemos hacer capturando el valor de la edificabilidad a borde y borde, la persona que haga esa obra se queda con la posibilidad de construir en altura, no vende sino que se titulariza y eso genera la financiación de la obra. Las obras públicas que debe hacer el Distrito son la Séptima y la Primero de Mayo. Vamos a tener un centro de comando y control, es increíble que Bogotá no tiene semáforos inteligentes, aquí el semáforo en la Séptima con 85 dura el mismo tiempo en hora pico que en hora valle, en ninguna parte del mundo funciona así. Vamos a montar una concesión por toda la ciudad para fotomultas, necesitamos que el policía de tránsito deje de poner multas, para eso está una cámara.
- ¿Entonces le apostará a los peajes urbanos?
Unas obras con peajes urbanos, pero siempre con la alternativa de poder ir por la misma vía sin el peaje urbano, son carriles de velocidad de pago en los que usted no para en ningún lado y al lado los carriles lentos en los que no paga, pero demoran un poco más.
- ¿La solución a los buses azules cuál sería?
Hay que resolver el problema de las dos empresas que están quebradas, segundo diseñando nuevas rutas con ellos, hay que renegociar el contrato, porque quedó mal hecho. Si algo necesita prioridad es el SITP, hay que rediseñarlo y ponerlo a andar bien.
- ¿Qué va a hacer con el bicitaxismo que crece tanto en la capital?
Organizarlo, integrarlo al sistema, que no sea informal, que preste un servicio, porque lo necesita la gente.
- ¿Hay que renegociar el contrato de la primera fase de Transmilenio?
Este gobierno dejó vencer eso, este gobierno, por no tomar decisiones, dejó al garete ese proceso; ya será imposible cumplir, porque ya debería estar hecha. Mandar a hacer buses para Transmilenio se demora ocho meses. Al siguiente gobierno le tocará tomar una medidas: que haya una APP que la ejecute, me gusta la APP de Bogotá Eléctrica.
- ¿Bogotá sí puede ser competitiva?
Trabajar con los empresarios, no ahuyentarlos, manejo del suelo para que se puedan consolidar zonas; tener una industria en Bogotá se volvió un parto, es imposible, en el nuevo POT se deben diseñar los escenarios de industria y comercio, generar incentivos tributarios en materia de predial y de ICA.
- ¿Sí es posible bajar impuestos?
Para empresas e industrias nuevas que lleguen claro que sí y no es plata que estaba, es plata nueva, nueva generación de empleo. En los últimos doce años vimos que el Distrito y los empresarios no se hablaban, hay que trabajar así. El futuro económico de esta ciudad depende de que las universidades, la administración y el sector privado trabajen de la mano.
- ¿Qué industrias pueden llegar?
La de educación digital, todo lo que tiene que ver con servicios, por eso nuestra propuesta de tener una universidad digital prácticamente gratuita, que le cueste muy poco al ciudadano, para formación en el trabajo, para formación profesional. Será un elemento transformador de la ciudad, al paso que vamos, con la educación que tenemos, no hacemos la gran generación de conocimiento que Bogotá necesita.
- ¿Por qué le apuesta a la educación digital?
El mundo se ha demorado, pero no hay un sector más resistente al cambio que el sector educativo; resulta que así como cambió el periodismo y tantas industrias por la revolución de las comunicaciones, a la educación le llegó su hora. Quiero montar a Bogotá en esa ola, vamos a transformar la sociedad; no puedo, por presiones de sectores establecidos, no abrir esa ventana al mundo que es la educación del Siglo XXI, los otros candidatos hablan de la educación del Siglo XX, yo pienso en una educación que masifica la calidad, que mejora con calidad la educación primaria, secundaria, y media, que adapta y genera posibilidades de que personas de cualquier edad puedan tener, a bajísimo costo, una educación de calidad. El papel de un alcalde es abrir ese portafolio, para que tengamos la ciudad más educada. Las universidades como están son como los dinosaurios de hace 60 millones de años; el meteorito ya les cayó y se llama la educación digital, o se adaptan muy rápidamente o el mundo se los va a llevar por delante; quiero trabajar de la mano con los sectores tradicionales educativos para que demos ese tránsito, es que no hay opción. Podemos educador entre 100 mil y 200 mil personas en Bogotá, jamás habíamos tenido esa oportunidad, la Distrital educa 26 mil estudiantes.
- ¿Cuál es la salida a la crisis de la salud?
Hay poner a Capital Salud a funcionar mejor, pero la salida está en convertir a las Upas, las Uvas y los Cami (unidades de atención localizadas), en hospitales de primer nivel y asignarles población y que el 80 % de los problemas de esa población que se le asigna se resuelven allí, si mejora la puerta de entrada al sistema de salud se descongestionan los hospitales y a los especialistas. Es un tema de gerencia, de controlar y de hacer la prevención.
- ¿Llegará con su candidatura hasta el 25 de octubre o algo lo haría retirar?
Totalmente, el Uribismo es una fuerza en Bogotá que se despierta como un león. Óscar Iván Zuluaga no ganó nunca una encuesta, porque no la hacen con filtro, el uribismo no es abstencionista, es una fuerza muy dura en Bogotá y seguiremos siendo la fuerza política principal de la ciudad, que no quepa duda.
Comentarios ()