Con una lluvia de tomates a una imagen del Congreso de la República, ubicada frente del Capitolio Nacional, un importante número de transeúntes criticaron la inasistencia de los parlamentarios a la sesiones de la reforma a la salud.
La particular acción la realizó el llamado grupo de los indignados colombianos, que se ha unido por medio de un grupo significativo de ciudadanos que se llama el Partido del Tomate, quienes además aspiran a llegar al Congreso como una muestra de renovación del mismo.
Aunque en el evento hubo unas cien personas, el Partido del Tomate se pronunció por medio de un comunicado, en el cual señalaron que la protesta la realizan por la falta de cumplimiento y seriedad de los senadores al no querer votar la reforma a la salud.
"Cada congresista tiene un salario de 23'254.381 pesos mensual que equivale a 40 salarios mínimos. Muchas veces se escuchan voces defendiendo estas elevadas sumas con argumentos ridículos e insultantes como: ‘Si no les pagamos muy bien a los congresistas, es más probable que caigan en la corrupción’”, señalan en el comunicado.
Pero no sólo se quedaron en rechazar el ausentismo, también plantearon tres propuestas más que les presentarán a sus electores.
Una es permitir máximo dos periodos legislativos para los congresistas, “se necesita con urgencia renovación y rotación del poder. Es absurdo que haya parlamentarios con más de 30 años en el Congreso”.
La segunda es la pérdida de curul para los congresistas que no asistan a más del 20 por ciento de las sesiones sin una justificación de fuerza mayor.
Y la tercera, “igualar el sueldo de los congresistas con la tabla salarial docente según el decreto 1278 de 2002. Con un título de tecnólogo se ganaría 2.219.000, con un pregrado 2’500.000, con una especialización 2’792.000, con una maestría 3’895.000 y con doctorado 5’181.000”.
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