Ante el primer escándalo que ya rodea la campaña presidencial del uribismo, los precandidatos del Centro Democrático aseguraron este lunes que el ex gobernador de Antioquia, Luis Alfredo Ramos Botero, podrá explicar y dar sus razones por las que se reunión con jefes del paramilitarismo.
Ramos Botero fue anunciado el viernes pasado por el ex presidente Álvaro Uribe como uno de sus cinco precandidatos que se disputarán, en marzo de 2014, la candidatura a la presidencia mediante el sistema de consulta popular.
El también precandidato Oscar Iván Zuluaga sostuvo que Ramos es quien deberá responder por esa situación, pero confió en que lo va hacer dándole la cara al país sobre ese asunto.
“La responsabilidad es de cada uno, y él la debe asumir, van a surgir muchas cosas como esa y siempre estaremos dispuestos a dar la cara y asumir las realidades”, advirtió Zuluaga.
El precandidato se pronunció durante una reunión en la que estuvieron también sus compañeros de competencia, Francisco Santos y Carlos Holmes Trujillo, quienes igualmente coincidieron en que Ramos se pronunciará.
Incluso al ser preguntados sobre si debe renunciar ya a su postulación para no afectar la campaña uribista, Zuluaga respondió que “esa una decisión que él tomará y las explicaciones son de él”.
El ex gobernador de Antioquia, en diálogo con la Emisora Blu, sostuvo que cuando era senador se reunió con paramilitares en Bello, Antioquia, en el año 2004.
“No asistí ni participé, no sé por qué mi nombre queda allí, es una novela”, aseguró al ser preguntado sobre otra reunión en la que habría estado en enero de 2004 pero en compañía Oscar Suárez Mira, recientemente condenado por paramilitarismo.
Recordó que sí asistió a un encuentro en Bello con Iván Roberto Duque, alias ‘Ernesto Báez’, vocero de los desmovilizados, dentro del marco del proceso de desmovilización, “en el segundo semestre de 2004”.
Explicó que en esa reunión el paramilitar mostró preocupación por el futuro de los desmovilizados, que se sometían a la Ley de Justicia y Paz para la reinserción impulsada por el Gobierno de Álvaro Uribe.
También contó que en ese encuentro estuvo Albeiro Quintero, empresario hoy capturado y sindicado de financiar los grupos paramilitares de la época.
“En ese momento no me dio mala espina, estaba ejerciendo mi función como parlamentario y mi única intervención fue escuchar”, agregó el precandidato presidencial del uribismo a la emisora Blu.
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