Tras el debate que ha suscitado la participación del pastor evangélico, Miguel Arrázola, en la pasada marcha contra el Gobierno Santos y que fue convocada en diferentes ciudades del país por el Centro Democrático, originó que este martes, el líder de la iglesia Cristiana Ríos de Vida a través de su emisora Vida Radio, respondiera los interrogantes de críticos sobre su vinculación con el Uribismo y sobre una posible aspiración a un cargo público en la ciudad. (Lea aquí:El pastor Arrázola: entre la fe, la política y la polémica)
El pastor Miguel Arrázola aseguró que asistió a la marcha para ejercer su derecho como ciudadano y para levantar la voz frente a la situación actual por la que atraviesa el país.
“Además de ser pastor, soy papá, soy ciudadano consciente de lo que pasa en mi país. En ninguna parte de la Constitución, ni en ninguna parte de la biblia me impiden a mí expresarme públicamente o a favor en contra de un partido político. Existen muchos prejuicios contra mí porque la gente me ve dentro del contexto tradicional con sotana y me ven como alguien que no se puede expresar... menos participar en política; Cuando yo me entregué al señor, no se me fue dicho que no participara o hablara, por el contrario en la biblia todos los profetas tuvieron sus encontrones con los políticos y dictadores de la época. Estamos para levantar nuestra voz a favor de los principios bíblicos y en este país tenemos ese derecho constitucional y bíblico de no callar”.
El líder religioso señaló que los cuestionaremos que se han hecho en su contra y que lo vinculan con el Uribismo no tienen sustento ya que no milita con el Centro Democrático y sólo se ha visto con el expresidente una vez.
@PMiguelArrazola ahora pide #Respeto cuando en plaza pública pronuncia discurso guerrerista en marcha organizada por criminales? coherencia.
— #ChaoUribestias (@ChaoUribestias) 5 de abril de 2016
"A Uribe lo he visto solo una vez, cuando estuvo en un evento de la iglesia. Yo no milito en el partido del Centro Democrático. Si por conocer a Uribe me tachan de Uribista, entonces me deben decir Santista porque yo fui invitado a Palacio y estuve cenando con el Presidente Santos”.
Así mismo, agregó que “yo voté por Santos en la primera vuelta, en la segunda vuelta, no por las razones que pude confrontar con él cara a cara (…) Me tienen que decir entonces Galanista porque yo voté por José Galán cuando se lanzó a la Constituyente, tendrán que decirme Ramirista, porque abogo por las tesis de Martha Lucia Ramírez, y Barguilista porque aprecio mucho el liderazgo de David Barguil”.
Arrázola manifestó que no pretende oponerse al proceso de paz y que sus críticas tienen que ver con la forma como se están llevando a cabo las negociaciones, pues considera que Cuba no puede ser garante o territorio de una paz digna, pues está manchada de sangre y posee un tinte castrochavista.
“Yo no quiero una paz que venga de La Habana, quiero que el proceso se desarrolle en un país neutral como Costa Rica o Suiza; Cuando estuve con Santos le dije que la paz no debe darse en Cuba, se debe dar entre todos", dijo el pastor.
Frente a la percepción de muchos críticos sobre su intención de aspirar a la Alcaldía de Cartagena, el pastor dijo “ojalá, yo no le tengo miedo a ese cargo, mis obligaciones como pastor me lo evitan... Creo que si Dios permite en su tiempo... Ahora lo que me interesa es apoyar y sacar a la ciudad adelante”
No obstante, Miguel Arrázola fue enfático en decir que su congregación cuenta con alta credibilidad en la ciudad según las encuestas, y que siempre le han propuesto ser alcalde.
“Siempre me han propuesto ser Alcalde, cada vez que hay una crisis, vienen y me lo proponen. Todos los años lo hacen. Somos la iglesia más grande de la Costa, tengo 90 mil seguidores en Facebook, cruzadas evangélicas multitudinarias, la página web más vista, algo tengo que estar haciendo bien".
Finalmente, tanto el pastor Arrázola como su esposa María Paula, expresaron su firme intención de seguir levantando la voz de protesta frente a los problemas del país y a no quedarse callados pese a las críticas de sus detractores.
“Miguel y María Paula Arrázola tenemos cédula de ciudadanía de Colombia, no tenemos antecedentes, ninguna orden de captura, si pueden hablar los bandidos porque no podemos hablar nosotros; Vamos a seguir marchando, vamos a seguir hablando, gustele a quien le guste”, sostuvo la pastora María Paula Arrazola.
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