Un menor de dos años murió en la madrugada del miércoles en el hospital Cari de Alta Complejidad de Barranquilla debido a golpes en su cuerpo, tras haber sido trasladado desde el hospital del municipio de Sabanalarga.
Los médicos señalaron que el menor presentaba una fractura en uno de sus brazos, hemorragia abdominal y politraumatismos en la cabeza.
Luego de dos horas en la unidad de cuidados intensivos pediátricos, el menor falleció por un paro cardiorespiratorio, según reportó Ramón Quintero, gerente del Cari.
El menor también presentaba laceraciones y heridas de quemaduras previas, lo que para Quintero indica que los maltratos eran constantes.
Un primo del menor fallecido agregó esta mañana que el pequeño ya había estado bajo la protección del ICBF por problemas de desnutrición.
El Cari puso el caso conocimiento de la Policía de Infancia y Adolescencia del Distrito de Barranquilla y del Bienestar Familiar.
“El padrastro y la madre están siendo investigados por el estado en que se encontraba el niño. El dictamen del Instituto de Medicina Legal es que el niño tiene signos de violencia”, declaró Joaquín Buitrago, Comandante de la Policía del Atlántico.
Además afirmó que cuando las autoridades y los funcionarios del ICBF llegaron a la residencia del menor en el barrio Las Lomas del municipio de Sabanalarga, donde vivía con su madre y su padrastro, este último no se encontraba y la madre no informó sobre su paradero.
Extrañamente, Soilin León Duque, madre del menor, había ingresado al niño con otro nombre al hospital de Sabanalarga, supuestamente para evitar que le negaran el servicio.
Al hablar con los medios esta mañana, León Duque expresó en medio del llanto no saber por qué el menor presentaba golpes y aseguró que nunca dejaba al niño con desconocidos. Mientras tanto, el padrastro César Augusto Escorcia dijo no haber sido responsable de las lesiones.
La madre de Escorcia, Ledys Mercado, dijo que su hijo nunca maltrataba al niño, y que lo atendía por las mañanas antes de ir a trabajar mientras la mamá del pequeño dormía.
El Comandante de la Policía espera que el caso se resuelva en las próximas 48 horas.
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