A un buen ritmo avanzan las obras que desarrollan la Gobernación de Bolívar y la Alcaldía de Zambrano para frenar la erosión sobre el margen izquierdo del río Magdalena, en la calle de La Albarrada y la Ciénaga.
El alcalde, Alberto Murillo Palmera, recordó que debido a la fuerte temporada de lluvias decretó la calamidad pública para atender de manera inmediata las afectaciones existentes.
En ese sentido, adelantan las obras con el banco de maquinarias de la Gobernación por el acelerado crecimiento que ha tenido el afluente, que ha puesto en peligro aproximadamente dos kilómetros de la calle, que está totalmente deteriorada.
“Estamos restableciendo la vía para evitar que el río se desborde y se pueda presentar una emergencia en la población, también para garantizar la seguridad del municipio”, aseguró el mandatario.
Murillo agregó que el apoyo del Gobierno departamental ha sido fundamental, por lo que con sacos y piedras construyen una muralla que disminuya la socavación del predio donde están establecidas más de un centenar de viviendas.
Asimismo, construyen diques, soportados con madera y alambre de púa, tensores y material de relleno, que van a permitir rehabilitar la movilidad de los transeuntes. “Si no hubiésemos adoptado todas las medidas que se han adelantado hasta la fecha, el río se hubiera metido en el casco urbano”, advirtió el alcalde.
En cuanto a la Ciénaga, el mandatario indicó que también realizan obras de control de inundación, con el fin de evitar que el agua que está llegando siga hasta el río y se pierdan las especies de peces que allí se crían, y luego se transforman en el sustento de muchas familias zambraneras.
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