Desesperados por los malos olores y argumentando enfermedades en la piel y respiratorias, un gran número de habitantes de la urbanización Altos de Plan Parejo II, en Turbaco, le exigieron a la firma Enfoque Constructores que arreglara de una vez y por todas el sistema de alcantarillado. Denunciaron, a través de este medio, que este colapsa con frecuencia y que vivir en esas condiciones los tiene desesperados.
Enfoque Constructores, en un comunicado enviado a El Universal, señaló que la Promotora Altos de Plan Parejo II presentó “ante Cardique la documentación necesaria para la consecución de los permisos de vertimientos, pozo profundo y plan de manejo ambiental”, cumpliendo con los requisitos exigidos por la autoridad ambiental.
Como quiera que el municipio de Turbaco no cuenta con servicio de alcantarillado --según explicó-- los proyectos habitacionales que se levantan en la población deben construir sus propias Plantas de Tratamiento de Aguas Residuales (Ptard). “Una solución técnica que busca la sostenibilidad ambiental del proyecto, cuyo objeto es minimizar, mitigar y controlar los impactos significativos que se pueden presentar por la disposición de las aguas residuales domesticas de la población que habita en área del proyecto”, señala el documento.
Aquí explica que la planta de tratamiento consta de cuatro módulos y sólo llevan construido uno. “Los cuales estarán conectados a un sistema de tratamiento de olores basados en el principio de dilución y adsorción. El sistema de control de olores tiene una eficiencia del 99.9%”.
Sin embargo, señala que debido a las quejas que la comunidad ha entablado ante Cardique por los “olores ofensivos”, los procesos de construcción no se adelantan como es debido. Esto
hizo que la entidad impusiera una medida preventiva que paralizó el proyecto de vivienda y por ende la construcción de la Ptard.
La medida preventiva que fue levantada mediante Resolución 0712 de 2016, tras una visita de inspección realizada al proyecto urbanístico, se dio luego de que la constructora entregara un informe sobre la situación ambiental. Con esto, según la firma, se pretendía agilizar las obras del alcantarillado. Sin embargo, “la comunidad radicó varios recursos de reposición que dilatan más los tiempos para que la constructora termine las adecuaciones de la planta”.
También se dijo que para que este sistema funcione, la comunidad debe evitar arrojar materiales sólidos como madera, pañales, toallas sanitarias, entre otros, que son los que hacen que el bombeo colapse. “Se considera importante que se realicen de manera ‘inmediata’ las medidas correctivas del caso que haya lugar”.
La firma añadió que “la no terminación del sistema es imputable a la comunidad, quien en búsqueda de beneficios particulares sobre los derechos generales se encuentra obstruyendo una orden de la entidad competente”.
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