Un portavoz del consorcio Colegios de Bolívar reiteró que la demora en el inicio de la construcción de la Institución Educativa del corregimiento San Miguel, en Hatillo de Loba, se debe a la ola invernal que ha mantenido inundado el terreno previsto para tal fin desde mayo del año pasado.
Sin embargo, la comunidad ha insistido en que ya las aguas han bajado y decidieron irse a paro hasta tanto el contratista no le dé inicio a esta obra qu está detenidad desde mayo del 2017. Así lo expresaron días a traás a este medio y en donde el compromiso es retomar las labores el próximo lunes. "Si no vemos que se inicien las obras seguiremos en paro", argumentaron los padres.
Recalcó que la ejecución de las obras de construcción de la institución educativa está incluida en el contrato 980, suscrito con la Gobernación de Bolívar; y en el mismo se incluyen otras obras, entre ellas: la Institución de San Lázaro, en San Fernando, obra concluida y a la espera que la Alcaldía suscriba un convenio con Electricaribe para su energizaciòn y entrega, y que la Gobernación cancele a CSB los gastos de estudio para permiso vertimiento. El contrato también incluye la Institución Educativa de La Rinconada, en Mompox, cuya estructura avanza en un 70%. “Esto indica que el contratista si cumple”, indicó.
El vocero del consorcio Colegios de Bolívar precisó que tienen toda la intención de iniciar los trabajos de construcción de la Institución Educativa San Miguel, pero ante el inminente riesgo de inundaciones sería -según explicó- una irresponsabilidad colocar un ladrillo con el diseño actual. “De todo esto conocen las veedurìas, los miembros de Juntas de Acciones Comunal, profesores y comunidad, como está plasmado en actas”, dijo.
Precisó que el diseño aprobado para la construcción contemplaba en sus cimientos una estructura robusta, pero calculada para una situación en la cual el nivel freático de las aguas estaba muy por debajo del nivel inferior del cimiento. Sin embargo, la situación actual de aguas a nivel de superficie hace que las paredes de las excavaciones sean inestables, y que al sistema de cimentación ingresen partículas que no deben según diseño.
Con el fin de evitar soluciones de ingeniería que generen un mayor costo al proyecto, como instalar pilotes, la comunidad recomendó la tercera suspensión a la espera que el nivel del río Magdalena baje y poder continuar con el esquema diseñado ya aprobado. Esta suspensión se venció el 10 de enero pasado y como está registrado en bitacora, las aguas no han cedido.
El contratista Consorcio Colegios Bolivar, añadió, que mostrando su compromiso con la obra y con la comunidad, tiene desde hace ya un buen tiempo los materiales y equipos requeridos para la actividad. Así mismo, tiene también coordinada la mano de obra para la misma. En el sitio de obra se cuenta con el material pétreo, el acero, el cemento y el geo textil requeridos para la actividad.
“El compromiso del Consorcio Colegios de Bolívar es total ante su contratante y ante la comunidad. Hemos sido claros en indicar que esta demora no es atribuible a nosotros, pues afecta el equilibrio financiero, ya que el aumento de los costos administrativos y deinsumos siguen creciendo. Reiteramos que somos los principales interesados en que los trabajos se concluyan a la mayor brevedad”, sostuvo.
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