La violencia, el conflicto armado y el abandono del Estado han hecho de la vereda Las Brisas, en el corregimiento de San Cayetano, zona rural de San Juan Nepomuceno, una comunidad fuerte y valiente.
Así lo relata con nostalgia Rafael Posso, líder de esa zona campesina donde hombres del bloque Héroes Montes de María de las Autodefensas Unidas de Colombia (Auc) sembraron el terror y provocaron la muerte de muchos campesinos inocentes, y asegura que ahora son un ejemplo de superación y compromiso.
El líder indicó que la violencia que experimentaron en la zona de los Montes de María les ha permitido creer en ellos mismos y trabajar duro para vencer todas las adversidades que aún los persiguen. “Nosotros pusimos los muertos en la época donde el simple hecho de vivir en el campo nos convirtió en trofeos de la sanguinaria guerra de la nunca debimos hacer parte. Estamos superando las secuelas que nos dejaron las balas, el poder armado y la muerte”, expresó Posso.
Pero con su mirada puesta en el horizonte y la alegría que caracteriza a los montemarianos, Rafael sueña con hacer de Las Brisas, junto a sus compañeros, una vereda próspera y lograr el restablecimiento de sus derechos.
“Falta mucho”
Pero pese a su optimismo aún siguen luchando con las uñas para que llegue esa reparación colectiva e individual a la que tienen derecho por todo lo que vivieron. Posso indicó que aunque existe una Sentencia de Justicia y Paz para sus vereda y el corregimiento de Mampuján (Marialabaja), pocas han sido las promesas que para ellos se han cumplido.
Asegura que las vías de acceso están en mal estado, para lo cual la Alcaldía inició trabajos de recuperación como mecanismo de reparación, aunque dentro de la Sentencia eso no está incluido.
“Aún transitamos por las viejas trochas, debemos recorrer más de 40 kilómetros para llegar hasta el casco urbano y poder comercializar los pocos productos que cultivamos en la zona”, señaló Ariel García, presidente de la Junta de Acción Comunal.
La Alcaldía de San Juan destinó recursos para la construcción de una nueva sede escolar para garantizar el estudio de los menores que viven en Las Brisas.
“El noventa por ciento de la comunidad ha logrado perdonar todos los vejámenes a los que fueron sometidos, pero trabajamos para que el otro diez por ciento también lo haga y poder vivir en completa paz con el mundo y nosotros mismos”, agregó García.
Unas 38 familias han retornado a Las Brisas, pero aún el gobierno no les cumpla con la construcción de viviendas dignas para ellos y sus familias.
Retornados y sin viviendas
Lo que más le preocupa a la comunidad de Las Brisas es la construcción de las 42 viviendas que debieron recibir hace más de dos años como medida de reparación colectiva a través de los recursos aportados por el Banco Agrario y Comfamiliar. Aún no se construye la primera.
“38 familias han retornado de forma voluntaria pero aún no tienen una casa digna donde vivir luego de tanto pasar necesidades”.
No les han cumplido con la construcción de los pozos profundos para el abastecimiento del agua para el consumo, muy a pesar de que ya se realizaron los estudios.
“El estudio arrojó que no se pueden construir pozos anillados porque el nivel freático es muy bajo y están concertando con la Gobernación de Bolívar la construcción de estanques de almacenamiento”, contó la comunidad.
El Ministerio de Agricultura tiene un compromiso con los campesinos retornados para desarrollar allí proyectos productivos, pero según los representantes de la comunidad ha sido uno de los entes que más ha dilatado el proceso.
Hasta ahora solo les han cumplido con el Kiosco de la Memoria que construyó el Ministerio de Cultura y unas maquinarias para formar el centro de acopio para almacenar los productos agrícolas, que aún no funciona.
Alias ‘Cadena’, exjefe de las Auc, ordenó que 150 paramilitares entraran al casco urbano de la vereda Las Brisas y asesinaran a 11 personas. Algunas fueron degolladas y presentaban quemaduras en su cuerpo. Los paras las acusaron de ser supuestos colaboradores de la guerrilla, pero las investigaciones judiciales demostraron que se trataba de campesinos de la zona. Estos hechos ocurrieron el 10 y 11 de marzo del año 2000.
Algunos compromisos
El alcalde de San Juan aseguró que se han realizado gestiones para asegurar los recursos que les permitan cumplir con lo ordenado en la sentencia, pero que mientras eso se logra, desde su administración y con recursos propios han cumplido algunos de los compromisos que les corresponde para que La Brisas tenga las condiciones para que las personas puedan retornar.
Es así como el municipio ha cumplido con varios exhortos y esperan poder seguir trabajando para toda la comunidad. Acosta resaltó que cada proyecto ha sido radicado, pero desafortunadamente su aprobación se demora mucho, lo que atrasa las inversiones y las obras.
Los asesinados
Dalmiro Barrios Lobelo, Jorge Eliécer Tovar Pérez, José Joaquín Posso García, Joaquín Fernando Posso Ortega, Alfredo Luis Posso García, Pedro Manuel Castellano Culen, Rafael Mercado García, Wilfrido Mercado Tapia, Gabriel Mercado García, José del Rosario Mercado García, Manuel Yépez Mercado y Alexis Rojas Cantillo.
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