Habitantes del barrio Villa Alegría, en San Jacinto, denunciaron los elevados costos que les está facturando la empresa de Energía Social por la prestación del servicio.
Según Luis Miguel Rivera Herrera, habitante del barrio y uno de los afectados, lo que está haciendo la empresa de energía con ellos es un abuso, puesto que la mayoría de las viviendas solo cuentan con dos bombillos y un televisor.
Señaló, además, que no cuentan con un medidor en las viviendas que determine los kilovatios que consumen mensualmente y en el sector solo hay un transformador. Asimismo, denunció las deudas millonarias que tienen con la empresa de acuerdo a lo estipulado en las facturas.
Ana Sierra Pérez, otra de la que dice que tiene recibos demasiado costosos, asegura que en los últimas facturas de cobro le han llegado por valor impensable de $250 mil y 300.000 pesos.
“Y a eso súmele que tenemos deudas acumuladas por más de un millón de pesos. Queremos que se haga una reunión para concertar, porque no es posible que sigan esas anomalías”, dijo la mujer.
El gerente de Energía Social, Miguel Ángel Santesteban, señaló que el sector es considerado por la regulación eléctrica vigente un asentamiento subnormal, dado que las redes eléctricas no cumplen con las normas técnicas establecidas en la ley y en su momento éstas fueron construidas sin autorización.
Agregó que instalarán una carpa de atención al cliente en el barrio para revisar los casos y darle su respectiva solución la cual se verá reflejada en su próxima facturación.
“Es así como la comercializadora propicia espacios de acercamientos con las comunidades donde desarrolla su actividad comercial, en busca de generar la participación activa de ellas, para darle solución a un problema”, dijo.
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