El paseo familiar que el primero de enero emprendió muy temprano la familia Urrutia Barrios, se convirtió en tragedia a las 2:00 de la tarde cuando la pequeña Sandrith Paola, de tres años, fue hallada muerta en las aguas del río Soloria, en La Jagua de Ibirico, Cesar.
Un aparente descuido de sus padres sería la razón de lo sucedido, informó el subcomandante de la Policía en el departamento, coronel Edgar Orlando Rodríguez.
“La niña se metió a bañar mientras su madre le daba tetero a un niño de meses y el padre colgaba una hamaca”, relató el oficial de acuerdo a la versión entregada por los adultos.
Sandrith Paola fue sacada con urgencia del caudal y trasladada al hospital local ‘Jorge Isaac Rincón’, donde los médicos confirmaron el deceso. “Es importante que los padres estén muy atentos a los niños, sobre todo cuando se está frente a una piscina, un lago o un río, porque son muchos los accidentes lamentables que pueden ocurrir; aquí no hay otra razón de ser que un descuido”, manifestó.
El cuerpo de la pequeña fue inspeccionado por agentes de policía judicial y trasladado a la morgue de Medicina Legal, donde le practicarán la necropsia.
Esta es la única muerte por inmersión que ocurre en el Cesar durante la celebración del Año Nuevo, informaron las autoridades.
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