Los miembros de bandas criminales estarían obligando a los campesinos de Córdoba, especialmente a los del Nudo del Paramillo, a cultivar coca. La denuncia la hizo el defensor de derechos humanos del movimiento Marcha Patriótica, Andrés Chica.
Dijo que para nadie es un secreto la fuerte presencia de la estructura criminal en algunas áreas de Córdoba y el ofrecimiento de un millón 800 mil pesos por cada hectárea sembrada en los municipios de Tierralta, Valencia, Puerto Libertador y San José de Uré, cifra que es aceptada sin reparo por algunos campesinos de la zona.
El voceros del movimiento se mostró preocupado por la delicada situación de orden público que se está registrando en Córdoba, donde se han incrementado los índices de extorsión, amenazas, presiones y donde se ha recrudecido el daño ambiental por la minería ilegal, fenómenos que se suman al cultivo y comercialización de la droga.
Responsabilizó en parte al Gobierno, aduciendo que ha incumplido con los acuerdos de restitución voluntaria de cultivos ilícitos en Córdoba y no ha hecho las inversiones que se requieren para garantizar que los campesinos saquen sus cultivos a los centros de acopio y de esa manera disminuir los costos del transporte.
Las autoridades de esta sección del país han manifestado su preocupación porque efectivamente en el departamento de Córdoba, especialmente en el sur, hay un reporte de 2.600 hectáreas de coca sembradas, suma superior a la registrada en los años anteriores cuando se sembraron 1.363 hectáreas y 1.668 en 2016.
El comandante de la Décimo Primera Brigada en Córdoba, coronel Javier Marín Fernández, indicó que se han erradicado manualmente en los últimos meses cerca de 100 hectáreas, en la zona rural del municipio de Tierralta. Sin embargo, esta suma es mínima si se compara con el creciente número de hectáreas sembradas.
Comentarios ()