La Contraloría General de la Nación encontró irregularidades en el manejo del Plan de Alimentación Escolar en los municipios de Montería, Sahagún, Lorica, Cereté y San Bernardo del Viento donde se reportan 10 hallazgos fiscales por una suma cercana a los 1.841 millones de pesos.
El informe presentado por el órgano de control, estableció que tanto en la Gobernación de Córdoba como en la Alcaldía de Montería no hay coincidencias entre el número de estudiantes que aparecen matriculados y los que figuran en el listado de beneficiarios de los programas, además de la repetitiva presentación del mismo oferente en una sola entidad territorial para varias vigencias, que ejecutaron más de 75 mil millones de pesos.
Se refiere así mismo a Sahagún indicando que hay cuatro hallazgos fiscales que ascienden a 744 millones de pesos, representados en sobrecostos, falta de registros y suministros de alimentación escolar por un precio menor al establecido en el contrato.
Para el caso de Lorica señalan que hay un presunto detrimento en tres contratos, especialmente el suscrito con la Fundación Tierra Nuestra al cual se le incrementó el valor del almuerzo hasta llevarlo a dos mil pesos, sin que mediara justificación alguna. Se habla de un contrato con la misma fundación por 139 millones de pesos y deficiencias como la no contratación de la supervisión de los contratos durante los cuatro primeros meses del año anterior.
En Cereté hay dos hallazgos fiscales por valor de 234 millones de pesos, incumplimiento de las líneas del Plan de Alimentación Escolar toda vez que la Secretaría de Educación no tiene un diagnóstico formal en el que recopile, consolide y se identifique la población escolar que debe recibir la atención alimentaria pero aún en algunas instituciones esta se brinda en medio del riesgo para los menores porque las pipetas de gas están cerca de las estufas y los niños consumen los alimentos en un laboratorio de física, tal y como ocurre en el Marceliano Polo.
En San Bernardo del Viento la situación no es diferente. Cuestionaron un contrato suscrito con la Corporación Viento Mío en el cual la Alcaldía pagó un mayor valor por ración durante 65 días para dos mil 107 cupos, lo que podría traducirse en un detrimento cercano a los 30 millones de pesos.
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