Un total de 300 toneladas de concreto soportan la estructura del nuevo puente vehicular que se construye en la calle 29 de Montería, justo en el mismo sitio en el que se encontraba la tradicional glorieta con fuente de agua.
Luego del colapso de parte de la estructura del puente que se construye frente al aeropuerto Los Garzones de Montería, los contratistas de la obra en mención cuidaron cada uno de los detalles para evitar una nueva tragedia y el vaciado de la losa se hizo durante 6 horas continuas, sin ningún tipo de contratiempo.
La gerente de Montería Amable, Ana María Loaiza, indicó que se tomaron todas las medidas preventivas para garantizar el éxito del proceso que culminará con una de las obras de descongestión vial más importante de la ciudad.
Por su parte, Milton Granados, director de la obra, indicó que quedó culminada la luz número uno o luz sur del puente, un volumen aproximado de 135 metros cúbicos equivalentes a 300 toneladas de concreto que sostienen las vigas.
Explicó que el proceso fue muy seguro desde el punto de vista estructural porque a las vigas, en vez de que la carga les afecte negativamente, por el contrario bajan los niveles de compresión.
El proceso se adelantó con el apoyo del Cuerpo de Bomberos y la Defensa Civil, quienes estuvieron durante el proceso con el fin de atender cualquier emergencia que se pudiera presentar. También tenían en el lugar una ambulancia y cuerpo de rescatistas, al igual que una brigada de emergencia.
De igual informa, se diseñó un plan de contingencia con las clínicas de Traumas y Fracturas y la Zayma para que se agilizaran los procesos en caso de emergencia.
Como se recordará, en el colapso del puente del aeropuerto los heridos tuvieron que ser trasladados en los carros de la policía hasta los centros asistenciales porque no contaban con ambulancias en el lugar.
Voceros de Montería Amable insistieron en que cuentan con rigurosos procedimientos de seguridad industrial y, desde un comienzo, el Consorcio Intervial, encargado de la construcción del puente, hizo un convenio con el Sena para la capacitación del personal en trabajo en altura.
Finalmente, indicaron que se espera que en la primera quincena de noviembre se haga el segundo vaciado de losa en el puente. Después se deben hacer otros procedimientos como la aplicación de la capa de rodadura y las pruebas de resistencia con el fin de dejarlo habilitado para el paso vehicular a mediados del mes de diciembre.
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