Cinco municipios de Córdoba podrían tener control biométrico el día de las elecciones, el próximo 25 de octubre, con el fin de evitar que ocurran suplantaciones a la hora de votar y elegir a los nuevos mandatarios. Se realizará a través de la verificación de la huella dactilar.
La solicitud formal la hizo el gobernador de Córdoba, Alejandro Lyons, quien dijo que los informes de inteligencia han permitido establecer el riesgo que podría existir en los municipios de Tuchín, Chinú, Sahagún, La Apartada y San Bernardo del Viento.
El mandatario hizo la advertencia en el marco de la reunión de seguimiento electoral, en la que se hizo un análisis de la situación en Córdoba con miras a los comicios de este mes.
Explicó que en los municipios antes señalados hay malestar por el gran número de cédulas que fueron anuladas, aduciendo trashumancia electoral y que ello se convierte en una alerta para las autoridades.
Agregó que se diseñó un plan especial de seguridad en los municipios de La Apartada y San José de Uré, donde fueron anuladas cerca del 80 por ciento de las cédulas inscritas para la presente contienda electoral, hecho que podría generar desórdenes cuando las personas se acerquen a votar y encuentren que su documento está en la lista de inhabilitados para ejercer el derecho democrático.
El comandante de la Policía de Córdoba, coronel Carlos Vargas, reportó una situación de normalidad y aseguró que hay un plan especial para garantizar la tranquilidad en las elecciones.
Finalmente, en el comité se estableció que no hay zonas vedadas para los candidatos y que todos están haciendo sus campañas, sin ningún tipo de restricciones.
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