El abogado defensor de Joicer Hernández, confeso asesino del director de regalías de Córdoba, Jairo Zapa Pérez, insistió en que el crimen del ingeniero tuvo móviles pasionales.
Así lo reiteró en la prolongada audiencia que se llevó a cabo en el día de ayer, la cual se inició a las 9:30 de la mañana, se suspendió hacia el medio día y fue reanudada a las 3:30 de la tarde.
En la oportunidad el defensor solicitó la nulidad parcial del proceso, aduciendo que hubo desconocimiento de un preacuerdo con la Fiscalía y víctimas para confesar el crimen y el sitio en el que había sido sepultado el funcionario de la Gobernación de Córdoba.
Sostiene que se trató de un homicidio simple e invoca ira e intenso dolor de Hernández porque su supuesta mujer, Zuath Naidú, tenía enredos sentimentales con Zapa.
Como se recordará esta versión ha sido desmentida en reiteradas oportunidades por el mismo Vicefiscal General de la Nación, Jorge Fernando Perdomo Torres, quien señala que las investigaciones apuntan a que pudo tratarse de un crimen relacionado con el manejo de millonarios recursos en la oficina de regalías de Córdoba.
Otra de las novedades de la audiencia de ayer tuvo que ver con el cambio de abogados de los familiares de la víctima. Jaime Granados asumirá de ahora en adelante la defensa de los padres y hermanos de Jairo Zapa, en reemplazo del jurista Anacario Pérez, quien lideró el proceso hasta el momento. No dieron ninguna explicación en torno a su decisión.
Entretanto, la esposa del asesinado ingeniero, jairo Zapa Pérez, también le quitó poder a su abogado Lesmer Quintero, quien ha recibido múltiples amenazas desde que inició el proceso de defensa de la viuda, tras el crimen ocurrido el pasado 27 de marzo, luego que Zapa se reuniera en una casa del norte de Montería con varios compañeros de trabajo, contratistas de la Gobernación y con su confeso asesino.
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