El Ministro de Defensa de Colombia, Juan Carlos Pinzón, desconocía que el director de la Oficina de Regalías de Córdoba, Jairo Zapa, había desaparecido el pasado 27 de marzo de Montería.
Así quedó evidenciado tras una pregunta formulada por el periodista Gustavo Santiago ante lo cual respondió: “No se de qué me están hablando”.
Visiblemente molesto ante la insistencia de la prensa local por un tema que ha generado la máxima expectativa en los últimos días en Córdoba el Ministro insistió en que no había sido informado con la suficiente antelación las preguntas que le formularían durante su visita a la ciudad.
El gesto del funcionario nacional, responsable de la seguridad de los colombianos, generó una cadena de comentarios en las redes sociales. Para algunos era una ofensa que el titular de la cartera de defensa desconociera un tema álgido relacionado con la seguridad y para otros era un ardid del Gobierno para no hacer mención del tema.
La visita de Mindefensa a Montería se hizo el sábado anterior, justamente dos días después de la audiencia de imputación de cargos a las seis personas detenidas por su presunta vinculación con la desaparición del ingeniero civil de 36 años.
También dos días después que el fiscal encargado de la investigación, Víctor Esquivia, revelara que Zapa habría sido estrangulado por un desmovilizado de las autodefensas de nombre Joice Rafael Hernández Muñoz, a quien le pagarían 10 millones de pesos para ejecutar la orden, impartida presuntamente por el contratista y asesor científico de la empresa Semiagro, Jesús Henao Sarmiento, con quien Zapa tenía estrechos vínculos de amistad.
Como se recordará por este caso están capturados Albeiro Torres Redondo, de 42 años, técnico en sistemas; Zuán Naudith López Acevedo, de 19 años, bachiller y compañera sentimental del desmovilizado, y Joice Rafael Hernández Muñoz, sindicado por la Fiscalía de ser el autor material del hecho, todos residentes en Santa Marta.
También están detenidos Carlos Alberto Pérez Escobar, de 37 años, abogado y profesor universitario, primo hermano del desaparecido; Maximiliano García Bazanta, subdirector de la Oficina de Regalías de la Gobernación de Córdoba, y Jesús Henao Sarmiento, contratista.
SANTOS PROMETIÓ AYUDA
El presidente de la República, Juan Manuel Santos, tampoco hizo alusión al caso de la desaparición del ingeniero Jairo Zapa Pérez durante su intervención en el parque de la ciudad, justo el día en que hizo entrega de la Policía Metropolitana de Montería.
Pese a que los medios y la comunidad esperaban que hiciera alusión al tema, el mandatario no lo mencionó.
Se conoció que horas más tarde, de ese mismo sábado, se comunicó vía telefónica, con la esposa de Zapa, María Isabel Valencia, a quien le prometió ayudarla para encontrar a su esposo.
La mediación para que el contacto se llevara a cabo la hizo el gobernador de Córdoba, Alejandro Lyons, en una reunión privada que tuvo con el mandatario en el Centro de Convenciones de Montería.
ZAPA Y LOS IMPLICADOS
Aunque el proceso apenas se inicia, la desaparición del ingeniero Jairo Zapa ha generado todo tipo de interrogantes en la comunidad cordobesa.
El primero de ellos es la forma en que conoció y contactó a los seis implicados en su desaparición y posible muerte.
Las investigaciones precisan que Zapa conoció a Jesús Henao, señalado por la Fiscalía de ser el determinador de la muerte de Zapa por problemas de dineros de los contratos de regalías, cuando era subdirector de planeación de la Corporación de los Valles del Sinú y San Jorge, CVS.
Para entonces Henao era contratista de la CVS y enfrentó una investigación porque al parecer falsificaba las pólizas de sus contratos. Ese proceso no prosperó por vencimiento de términos.
Cuando Zapa asume la Dirección de Regalías nuevamente lo contacta y afianzan los lazos de amistad hasta el punto que el pasado 7 de febrero fue invitado por Henao a Cartagena, con hotel, licor y comida pagos.
Con relación a su amistad con Maximiliano García se indicó que este era el segundo hombre al mando en la Dirección de Regalías de la Gobernación de Córdoba.
Habían disfrutado juntos de los paseos a los cuales invitaba Henao. Eran amigos y compañeros de trabajo.
La Fiscalía investiga un presunto viaje de García y Henao a Santa Marta, el mismo día de la desaparición, y uno de ellos se habría registrado con la cédula de Zapa para despistar a las autoridades.
Con el abogado Carlos Alberto Pérez Escobar, de 37 años, la relación era aún mayor pues además de amigos eran primos hermanos.
Pérez vivía en Bogotá y luego de la designación de su primo como director de la Oficina de Regalías de la Gobernación de Córdoba se vino en calidad de asesor personal de este. También habían disfrutado juntos de las invitaciones de Henao.
Con las otras tres personas capturadas en Santa Marta, Jesús Albeiro Torres Redondo, Joice Hernández Muñoz y Zuán López Acevedo, se conoció durante un viaje a Cartagena y luego a las Islas del Rosario a una cabaña de la desaparecida Fanny Mickey, a la cual fueron invitados por Henao.
Los tres últimos eran los encargados de ‘atender’ a los invitados y según la testigo protegida por la Fiscalía, Georgina Valdez, también tenían como misión asesinar a Zapa y a su primo Carlos Pérez.
¿ROGÓ O DURMIÓ?
Una de las revelaciones hechas por la Fiscalía ante el Juez de control de garantías señalaba que Zapa Pérez habría rogado a Joice Hernández, desmovilizado conocido con el alias ‘el Mono’ para que no lo asesinara.
“Yo te conozco, piensa en mis hijos, no lo hagas”, fueron las palabras que según la testigo pronunció Zapa antes de ser estrangulado.
Ella dice que sabe ese detalle porque se lo contó Jesús Albeiro Torres Redondo en una noche de tragos en Santa Marta.
La misma testigo afirma que a Zapa le dieron un medicamento para dormir y lo sacaron de la casa, al norte de Montería, en un taxi, junto a Torres Redondo, a Hernández Muñoz y a Zuán López Acevedo, pero que el primero se bajó del taxi antes de llegar a un destino específico.
Esas dos versiones son contradictorias, a juicio de los defensores. Sin embargo, la Fiscalía dijo que tiene varias pruebas que presentará durante la audiencia.
¿RAZONES PARA MATARLO?
Uno de los interrogantes que más se han hecho los cordobeses en los últimos días es cuáles serían las razones por las cuales habrían asesinado a Jairo Zapa Pérez.
Se han tejido decenas de versiones. Sin embargo, no hay una que permita esclarecer el hecho.
La Fiscalía se basa en la declaración dada por la testigo en el sentido de que Zapa estaría pidiendo una comisión de miles de millones por la adjudicación de un contrato a través de la oficina que manejaba.
De ahí en adelante se han tejido todo tipo de especulaciones hasta que Henao habría anticipado unos recursos para que le adjudicaran un contrato y que luego se lo habían dado a otra firma que a su vez devolvería el anticipo dado por Henao.
Por lo pronto ni Henao, ni los otros cinco investigados por la desaparición de Zapa han sido vencidos en juicio y mucho menos han aceptado los cargos que le imputó la Fiscalía: desaparición forzada agravada.
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