Cada uno de los contratos suscritos entre el hospital San Jerónimo y proveedores, trabajadores y contratistas durante el año anterior serán revisados en detalle por la Procuraduría de Córdoba.
La auditoría se iniciará el próximo 2 de diciembre y, según la notificación del ente de control, el objetivo es verificar si la actuación de los distintos gerentes que estuvieron en el centro asistencial se ajustó a la ley.
Entre los documentos que revisarán están las órdenes de prestación de servicios para la compra de combustible y el listado de vehículos del centro asistencial, pues hay indicios que hacen suponer a las autoridades que echaban gasolina a carros particulares.
También investigarán el contrato suscrito con Nury Támara Montes, por $25 millones, para el suministro de material de osteosíntesis y con Óscar Salcedo González, por $39 millones, entre otros.
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