El presidente de Colombia, Juan Manuel Santos, pidió a los gobernadores del país que apoyen el proceso de paz, pese a las dificultades y a los costos políticos que el mismo implique.
Durante su intervención en la Cumbre Rural de Gobernadores, que se realiza en el Centro de Convenciones de Montería, negó en forma categórica que el país se le fuera a entregar al comunismo como se ha venido rumorando y que se estuvieran haciendo acuerdos por debajo de la mesa con los guerrilleros de las Farc en la Habana.
"Con la paz también seremos efectivos en la lucha contra la droga, y las Farc van a colaborar en la sustitución de los cultivos ilícitos", reiteró aduciendo que con ello mejorará la situación del campo colombiano y por ende los campesinos no tendrán que desplazarse a las ciudades. "Si paramos la guerra, también paramos la fábrica de víctimas", reiteró.
Santos aprovechó su visita a la capital cordobesa, acompañado de cuatro ministros, para anunciar que Montería será sede de los Juegos del Caribe 2018, debido al buen papel que desempeñó durante los pasados juegos nacionales.
Por su parte, el gobernador de Córdoba, Edwin Besaile, anfitrión del evento que reúne a 32 mandatarios, hizo un llamado firme para apostarle a la paz desde las regiones. "Los gobernantes seccionales y locales debemos estar preparados para asumir esa gran responsabilidad en cada una de nuestras jurisdicciones", reiteró.
De igual manera la presidenta de la Federación Nacional de Departamentos y gobernadores del Valle, Dilian Francisca Toro, dijo que los gobernadores deben comprometerse además en la pedagogía para la paz y garantizar que los acuerdos que se firmen en la Habana se vean reflejados en sus regiones.
Finalmente el director de la Federación Nacional de Departamentos, Amylkar Acosta, dijo que Colombia es un país de desigualdades, con enormes brechas intrarregionales e interregionales, pero la mayor de ellas es la que existe entre las zonas rurales y las ciudades.
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