La Alcaldía de Zambrano decretó en las últimas horas la Calamidad Pública en el municipio, debido a las afectaciones que están provocando las aguas del río Magdalena y por los bajos niveles de agua en la Ciénaga Grande y el riesgo que padecen las especies que habitan allí.
En cuanto al río, la desestabilización de los taludes y del dique de tierra que protegen más de 1 kilómetro de la margen izquierda del río, activó las alarmas en el municipio por posible desbordamiento de las aguas, las cuales alcanzan niveles muy altos por las fuertes lluvias.
Debido a esto, el alcalde Alberto Murillo Palmera, señaló que tuvo que convocar en el día de ayer al Comité de Gestión de Riesgo y Desastre Municipal, para analizar la amenaza que está generando el afluente en la población y diseñar un plan de mitigación y control de inundaciones.
El mandatario asegura que está atendiendo el llamado que constantemente están realizando los habitantes de los barrios San José, La Calle de la Albarrada y el sector Centro, quienes temen que debido a la falta de jarillones en tierra que son las estructuras que contrarrestaban la fuerza del agua, estas puedan inundar a toda la población.
Añadió que ya hay muchas viviendas que han colapsado y otras que podrían colapsar si no se toman los correctivos para el desastre ya ocurrido. “La crisis es cada vez más grande, no queremos que haya una tragedia que lamentar, necesitamos el apoyo de todos”.
Murillo manifestó que una vez decreta la Calamidad Pública, por afectaciones del río al municipio, le hacen un llamado al gobierno departamental y nacional para que realicen los aportes necesarios para evitar a futuro una catástrofe, haciendo la salvedad que este llamado se ha realizado con anterioridad sin obtener ninguna respuesta.
Sin embargo, Juan Contreras, afectado y habitante del sector, manifestó que viven en constante riesgo, la erosión es muy fuerte y podemos todos terminar en algún momento en el fondo del río.
"Llevamos varios años tratando de buscar una salida a la crisis, pero ésta cada vez es más grave. Hicieron una obra e instalaron unos geocontenedores porque iban a frenar la erosión y eso ha sido peor", señalaron otros moradores del sector.
La Ciénaga Grande
En cuanto a la Ciénaga, Murillo resaltó que desde el año 2010, ha sido imposible inyectarle agua del río Magdalena, pues hasta ahora están subiendo, siendo el arroyo Alférez la única fuente hídrica que alimenta este cuerpo de agua.
Con esta crisis se ha generado una sedimentación tanto en tierra como en la maleza, ya que eso lo arrastra la corriente del arroyo, producto de esto se ha perdido la profundidad de la Ciénaga y la descomposición de las aguas está afectando considerablemente todas las especies animales como a los pescadores.
Otro de los agravantes a que atribuyen las autoridades el problema, es la variante que fue construida desde el kilómetro 5 hasta el puente Zambrano-Plato, donde se construyeron 13 obras de arte (puentes pequeños).
Allí el nivel máximo de la Ciénaga coincide con el fondo de los puentes, lo que ocasiona que el volumen del agua no aumente y se siga saliendo hacia el río, generando el temor que también se salgan todas las especies que allí habitan y que son el sustento diario de más del 80 por ciento de la población.
“Aquí se hace necesaria la intervención urgente de Cardique, para que adelante todo lo concerniente, para evitar en el menor tiempo posible un daño ambiental irreversible”, añadió el mandatario.
A raíz de esta problemática y por petición de los pescadores del municipio, el mandatario tuvo también que convocar al Comité de Gestión de Riesgo para tratar la problemática que alberga ese humedal cenagoso.
Responde Gobernación
El director de Gestión de Riesgo y Desastres de Bolívar, Ariel Zambrano, expresó que para el municipio de Zambrano se va a disponer la ayuda del Banco de Maquinaria y el de materia.
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