La Unidad de Restitución de Tierras en Sucre empezará en San Onofre el estudio de las solicitudes de ingreso al Registro de Tierras Despojadas y Abandonadas Forzosamente, presentadas por las víctimas de esa localidad.
Lo anterior teniendo en cuenta que San Onofre fue centro de la violencia generada por células paramilitares en el departamento de Sucre y el país.
Según la Unidad, los hechos de violencia allí registrados abarcan despojos, desapariciones, masacres, abusos sexuales, control social mediante el terror generalizado y otros hechos victimizantes.
El número de muertes violentas a manos de miembros de las autodefensas, hasta el momento es indescifrable; teniendo en cuenta que aún siguen encontrando fosas comunes en diferentes puntos de la municipalidad.
Asimismo, indica la Unidad de Restitución de Tierras que entre los años 2000 y 2005 el bloque Héroes de los Montes de María, estructura que operaba en la zona al mando de Rodrigo Mercado Pelufo, alias “Cadena”, desplazó y despojó de sus tierras mediante coacción, intimidaciones y amenazas a decenas de campesinos quienes tenían como actividad económica la explotación ganadera y agrícola.
La Unidad de Restitución de Tierras, Dirección Territorial Sucre, empezó en el municipio de San Onofre los trámites administrativos para estudiar las solicitudes de ingreso al Registro de Tierras Despojadas y Abandonadas Forzosamente.
Los corregimientos microfocalizados de esta zona del país, hasta el momento, son Palmira Negra y Pajonalito, de donde provienen 67 reclamaciones de las 165 solicitudes de ingreso al registro presentadas en ese municipio.
Según la Dirección Territorial, la Unidad de Restitución de Tierras llega a actuar en el municipio de San Onofre en un momento crucial, cuando la población dejando a un lado los temores generados por el sometimiento paramilitar ha empezado una reconstrucción social que exige al Estado justicia, verdad y reparación.
La URT proyecta, con los estudios de rigor, aclarar las circunstancias que llevaron al éxodo de campesinos en San Onofre y a partir de ahí cumplir con su función de representar a las víctimas para que éstas puedan retornar a su territorio con garantías de desarrollo socioeconómico.
Actualmente, una significativa parte de los predios sobre los que existen solicitudes de restitución está siendo explotada por empresas reforestadoras de árboles de Teca, actividad productiva que se convirtió en una de las más predominantes en la región de los Montes de María y el Golfo de Morrosquillo.
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