¡Que Dios las ampare, reinas!

Las candidatas en un momento espiritual, le presentaron su “pliego petitorio” al Todopoderoso en la Iglesia de Santo Toribio.

En medio de una pertinaz llovizna y amparadas por enormes paraguas, las 24 candidatas llegaron al centro religioso junto con la Señorita Colombia, Natalia Navarro y los directivos del Concurso Nacional de Belleza (CNB).

Adentro, una selecta feligresía aguardaba ansiosa el ingreso de las reinas y tan pronto apareció la Señorita Colombia, todas las miradas se dirigieron hacia la puerta principal y una salva de aplausos le dio la bienvenida a las candidatas.

El coro de Nacho Corrales, uno de los más antiguos de la ciudad, dirigido por Hernán Alberto Salazar, inició el encuentro religioso con una canción que le imprimió el toque celestial a la cita y preparó el camino para el instante con el Señor.

El padre Carlos Lozano fue el encargado de oficiar la misa y su mensaje estuvo basado en el relato bíblico de Zaqueo, el hombre de pequeña estatura que luchó por tener un encuentro con Jesús y lo logró. “Hay que buscar al Señor”, fue la frase que el sacerdote recordó permanentemente a las concursantes que con mucha devoción escucharon su sermón.

“El futuro está en el Señor... lléguense al Señor, abran su corazón a Él ... y recuerden que la verdadera belleza es espiritual, pues la belleza física se acaba...” fueron algunos apartes del mensaje del padre Carlos.
Participaron de la lectura bíblica la Señorita Colombia y las candidatas de Cartagena y Bolívar, Karen Visbal y Tatiana Nájera, respectivamente.

El coro hacía más sublime el momento y llegó el instante de los ofrecimientos: Antioquia,  Natalia Isabel Gallo, ofreció el agua. A Tolima, Nicole Suárez, le correspondió el vino. El pan a Atlántico, Laura Jesurun. La bandera de Colombia a Catalina Robayo, del Valle, mientras que el cuadro con la imagen de la virgen fue ofrecido por la Señorita Guajira, Vanessa Sofía Durán.

A la hora de comulgar, la fila de candidatas fue enorme, pero un grupo de ellas se quedó meditando en las bancas del templo sin participar de ese instante. En ese grupo vimos a las candidatas de Chocó, Cauca, Sucre y Santander... El oficio religioso culminó con un concierto del Coro de Nacho Corrales y en las afueras una nube de curiosos acaparó a las candidatas para pedir autógrafos y tomarse fotos antes de empezar el recorrido por el Centro Histórico, a bordo de coches. Las reinas rezaron y empataron después de la super rumba del Club Cartagena.

Peticiones al Altísimo

El momento espiritual  de la Iglesia Santo Toribio fue aprovechado por las candidatas para hacer sus peticiones al Rey de Reyes y Señor de Señores. Hubo de todo. Desde las generosas que se limitaron a dar gracias a Dios, hasta las que pidieron el milagro de la coronita, pasando por el deseo de una rápida llegada de padres y novios a Cartagena. Aquí algunas de las peticiones:

Tolima: “Me conecté con Dios y busqué la Fuerza que me da”.
Risaralda: “Que me colabore en el Reinado, que cuide mi familia y que me dé mucha salud, que la necesito ahora en el Reinado”.

Quindío: “Que me traiga con vida y salud a mi padre, que llega el 10 noviembre desde Israel”.
Norte de Santander: “Le pedí mucho por el corazón de las personas para que se engrandecieran. Igualmente que me ilumine en mi actuar y en el Reinado. Igualmente que yo pueda ser portadora de esa paz que el Señor nos da”.

Meta: “Que me ilumine el camino y que él es el único que sabe que es lo va a pasar. Yo voy de la mano de él para que sea lo mejor para mí”.

Huila: “Que le regale la primera coronita al Departamento del Huila, que ha sido tan esquiva por muchos años”.
Cundinamarca: “Que me bendiga y me ayude hacer lo mejor. No se trata de ganar sino hacer las cosas con dedicación. Dios es la mejor compañía y le pido que me dé mucha energía”.

Cesar: “Sólo le doy gracias a Dios. Hoy es un día de tanta bendición y por eso le doy gracias”.

Cartagena: “Que me dé mucha sabiduría y fortaleza para sobresalir siempre en este grupo candidatas tan hermosas”.

Bogotá: “Vine a darle gracias a Dios porque su bendición ha sido conmigo”.