Acuerdo para beneficio del sector agropeciario

El Instituto Colombiano Agropecuario (ICA) y el Centro Internacional de Agricultura Tropical (CIAT) firmaron recientemente un acuerdo que busca aprovechar la experiencia de las dos entidades en beneficio del sector agropecuario. Según informes del ICA, líderes en temas de sanidad e investigación agropecuaria, de ambas entidades han decidido fortalecer sus acciones conjuntas en temas relacionados con diagnóstico de plagas y enfermedades que afectan la producción agropecuaria nacional y el desarrollo de estrategias frente al cambio climático. En lo relacionado con el tema de diagnóstico se busca trabajar de manera conjunta en el desarrollo de técnicas en el área molecular, que permitan hacer diagnóstico efectivo de plagas de importancia cuarenteneria sobre las cuales existan dificultades que impidan su identificación oportuna por método convencional o de aquellas que se requiera una identificación con mayor sensibilidad e inmediatez. “Una vez desarrolladas estas técnicas se busca que las mismas sean utilizadas por el ICA a través de su red de laboratorios en todo el país, con lo cual se fortalecerán nuestros servicios y adicionalmente se mejorará el nivel técnico de los funcionarios del ICA en estas técnicas de diagnóstico molecular”, dijo el gerente general del ICA, Luis Fernando Caicedo Lince. Este convenio capitalizará la experiencia del ICA en lo relacionado con proyectos que buscan apoyar al productor y atender la demanda en los mercados de importación y exportación, así como también verificar el estatus sanitario nacional. El acuerdo firmado permite acceder a los equipos de punta con los que cuenta el CIAT, específicamente el microscopio electrónico el cual apoyará el proceso de las pruebas diagnósticas que lo requieran. Adicionalmente trabajarán en la actualización de listas de cultivos prioritarios para la agricultura colombiana y de los requisitos fitosanitarios de la mayoría de los países, con el propósito de tener un insumo confiable que permita desarrollar y actualizar la normatividad sanitaria del país. Con esto se busca tener una orientación acertada en el proceso de apertura de mercados, transporte seguro de productos agrícolas a través de las fronteras, el movimiento adecuado del germoplasma y cuarentenas apropiadas a los cultivos tradicionales.