El Golfo y Montes de María, más apetecidos

Un plan de turismo periódicamente se aplica en el departamento de Sucre para todas las temporadas y en especial para fin de año y Semana Santa. Ese plan de turismo contempla las zonas más concurridas que son las del Golfo de Morrosquillo y municipios como Colosó y Toluviejo en la subregión de los Montes de María. Miguel Herrera, coordinador de Turismo Departamental, informó que esos planes son organizados con la Policía de Turismo (que actualmente se encuentra concentrada en el Golfo), Capitanía de Puerto, Dimar, Secretaría de Gobierno Departamental, autoridades y entidades municipales y departamental a través de sus dependencias de turismo. El plan turístico también contempla la parte hospitalaria y de atención y socorro como la Defensa Civil, con el fin de brindarle a los turistas un destino seguro y playas seguras. “Con Policía de Turismo que está en el Golfo de Morrosquillo indagamos que la afluencia de personas en esa área hasta la mañana de ayer, no era muy alta, y habían llegado solamente un 35 ó 40 por ciento de los turistas que siempre acostumbran visitar las playas. No obstante algunos hoteleros afirmaron que los turistas tradicionalmente empiezan a llegar desde el miércoles en la tarde y retornan el Domingo de Resurrección. La misma información reportó una parte de las agencias de transporte de la capital sucreña, de donde se notó hasta ayer un movimiento normal y moderado sin aglomeraciones”, dijo Herrera. Dentro de los destinos turísticos del departamento con mayor afluencia están el Golfo de Morrosquillo con el turismo de sol y playa, seguido de la oferta ecoturística de sitios muy tranquilos como Colosó y Toluviejo, donde se encuentra Roca Madre y los parques ecoturísticos como Laderas y Villeros, que siempre han estado en la mira de los turistas como destinos preferidos. Entre tanto, hay un segmento de la población a la que le gusta mantener la espiritualidad en la Semana Santa y concentran su tiempo más en la parte religiosa que ofrece Santiago de Tolú y en las Sabanas de Sucre, en aquellos pueblos que conservan la representación de los viacrucis y procesiones que se acostumbran para esta época.