Sucesos


Encapuchados merodean por Ovejas y El Carmen

EL UNIVERSAL

03 de septiembre de 2009 12:01 AM

Edwin Rafael Atencia Luna, hermano de Deivis José Canoles Contreras, asesinado la tarde del lunes en área rural de Macayepo (Bolívar) denunció que desde hace varios meses hombres encapuchados y portando armas cortas siguen frecuentando y atemorizando a la comunidad en las áreas rurales de los municipios de Ovejas y El Carmen, sin que la Fuerza Pública haga algo al respecto. Ayer, mientras reclamaba el cuerpo de su hermano de 20 años en la morgue del Hospital Universitario de Sincelejo, Edwin Rafael dijo que el joven fue asesinado por dos hombres encapuchados que lo esperaban en un camino, quienes ya habían sido vistos por otros campesinos que dieron aviso a un grupo de Infantes de Marina que estaba cerca al lugar de los hechos, pero supuestamente los militares desestimaron la información. El comandante de la Primera Brigada de Infantería de Marina, coronel César Cardona Ortiz, entregó su versión vía telefónica respecto a las quejas aduciendo que las tropas mantienen patrullajes permanentes y que no hay denuncias precisas sobre la supuesta presencia de hombres encapuchados. “La gente dice que hay encapuchados, pero no existe una denuncia formal de quiénes son o dónde los han visto. Las tropas patrullan permanentemente, pero nadie quiere denunciar. Ellos no dieron aviso, de hacerlo las tropas hubieran reaccionado”, manifestó el oficial desde la ciudad de Bogotá. El familiar querellante confirmó que el occiso, quien llevaba los apellidos de su padre de crianza, retornaba la tarde del lunes de trabajar en un cultivo ubicado en La Pita del Pavo, jurisdicción de Macayepo, en compañía de otras dos personas, y cuando se dirigía hacia su parcela fueron detenidos por los desconocidos. “Él estaba acompañado de otras dos personas y los detuvieron en el camino. Eran dos hombres con las caras tapadas. Dejaron ir a dos y se quedaron con mi hermano”, dijo Edwin Atencia. Agregó que los hombres encapuchados les advirtieron a los otros que se quedaran callados y que no dijeran nada a nadie de su presencia. “Lo bajaron del burro y le revisaron el bolso. Según me informaron cuando los otros compañeros habían caminado varios minutos escucharon dos disparos”, puntualizó. El episodio ocurrió aproximadamente a las 6:40 del lunes y el cuerpo de Deivid José Canoles sólo fue recogido al día siguiente, con un tiro en la cabeza porque nadie se atrevía a ir a recogerlo y las autoridades no llegaron hasta ese lugar. Según el hermano del campesino asesinado, al parecer unos niños vieron transitar por es sector a los encapuchados y “avisaron a unos soldados que estaban a 15 minutos de donde ocurrieron los hechos. “Los soldados debieron haber escuchado los disparos”, anotó el doliente. Los familiares de Canoles se preguntan por qué las autoridades tardaron varias horas en ir a resguardar la escena del crimen, si “varios Infantes de Marina estaban a 15 minutos” del lugar. “Los Infantes de Marina que fueron a resguardar el área donde mataron a mi hermano vinieron del sitio conocido como ‘La Sierra’, que hacen parte de una base ubicada en el sector de La Cansona, a unas dos horas del lugar de los hechos”, finalizó. Al amanecer, investigadores del CTI de la Fiscalía de El Carmen de Bolívar realizaron la inspección técnica y lo trasladaron ala morgue del hospital de El Carmen, de allí fue llevado a Sincelejo, donde llegó casi 24 horas después de ocurrido el hecho. Otros habitantes de la zona rural de Ovejas dijeron a la prensa que han sido conocedores de la presencia de personas extrañas. Manifestaron que el hecho más reciente ocurrió el pasado 5 de agosto en horas de la noche en el corregimiento de Chengue, cuando dos hombres, uno de ellos con la cara cubierta, llegaron a una pequeña tienda y preguntaron por una mujer, posteriormente atracaron al dueño de la tienda intimidándolo con un arma de fuego. Deivid José Canoles Contreras era el penúltimo de 10 hermanos, natural del corregimiento de Almagra, jurisdicción de Ovejas (Sucre) y residía en Macayepo, Bolívar. Era hijo de Candelaria Atencia Duque, su padre fue asesinado hace varios años. Las exequias se cumplieron en horas de la tarde de ayer en Ovejas. RECHAZO Como un hecho lamentable calificó el personero del municipio de Zambrano (Bolívar) Lizardo Torres Henriquez, el asesinato del campesino sucreño Deivid José Canoles, ocurrida en Macayepo, Bolívar. El representante del Ministerio Público señaló que ese acto criminal refleja que en la región de Los Montes de María no existe un grado de seguridad del 100 por ciento. “Tenemos que exigir alas autoridades el esclarecimiento de esos hechos, porque no podemos seguir con ese proceso de que encapuchados, o grupos al margen de la ley sigan atentando contra ese derecho a la vida”, dijo el personero bolivarense.

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